Su obra cumbre El maravilloso mago de Oz, sigue siendo adaptada exitosamente al teatro, al cine y hasta al circo. (ESPECIAL)
A 101 años de la muerte del afamado narrador estadounidense Lyman Frank Baum, que se cumplen este miércoles, su obra cumbre El maravilloso mago de Oz, sigue siendo adaptada exitosamente al teatro, al cine y hasta al circo.
Lyman Frank Baum nació el 15 de mayo de 1856 en Chittenango, Nueva York, Estados Unidos, en un hogar dirigido por Benjamin Ward Baum, quien hizo fortuna en la industria petrolera de Pensilvania, señala su biografía publicada en el portal de Internet imaginaria.com.ar.
El pequeño Lyman, quien fue el séptimo de nueve hijos, estudió en la academia militar de Peekskill, sin embargo sólo permaneció ahí un par de años, pues se interesó por el periodismo y a los 15 años convenció a su padre de que le comprara una imprenta.
En esos años y en compañía de su hermano Harry publicó The Rose Lawn Home Journal, revista literaria de cuatro páginas de corta duración a la que le siguió el periódico The Stamp Collector.
Posteriormente, el joven periodista trabajó en los almacenes de su cuñado Neal, Baum & Company y a los 20 años puso en marcha la empresa B. W. Baum & Sons, criadores de aves de pura raza.
En ese periodo además escribió artículos sobre la cría de aves en el New York Farmer and Dairyman y editó el periódico The Poultry Record, de corta existencia.
Su incursión en el arte escénico se dio en 1880 luego de que su adinerado padre le regalara un teatro en Nueva York, donde creó una compañía y elaboró obras, de acuerdo con sus datos disponibles en el sitio electrónico poemas-del-alma.com.
En esos años el periodista, que tiempo atrás había contraído matrimonio con Maud Gage (1861-1953), abrió una tienda en Aberdeen, Dakota del Sur, la cual al poco tiempo quebró, lo que lo obligó a retomar su tarea de editor.
Tiempo después de que su periódico local fracasara, se trasladó a Chicago, donde laboró en el Evening Post. No obstante, abandonó este empleo al cabo de un mes y aceptó un puesto como viajante de comercio en la Pitkin & Brooks, una compañía de venta al por mayor de porcelana y cristal.
En una reunión con sus cuatro hijos, Baum creó las historias que integraron su primer libro Cuentos de mamá oca (1897), que pese al éxito obtenido no fue reeditado.
Un año más tarde, el ahora escritor adquirió una imprenta de pedal, desde la que lanzó By the Candelabra’s Glare, colección de poemas a la que le siguió Father Goose. His Book (1899), The Army (1900) y The Navy Alphabet (1900).
En 1900 lanzó su obra maestra, El maravilloso Mago de Oz, que desde su primera edición, vendió miles de copias y se convirtió en un éxito, que le valió tanto a Baum como al ilustrador William Wallace Denslow (1856-1915) fortuna y prestigio.
Dos años después, el compositor Paul Tietjens (1877-1943) y el director teatral Julian Mitchell se asociaron para la producción de una fantasía musical con el nombre de El Mago de Oz.
En 1904 Reilly & Britton editó La maravillosa tierra de Oz, con ilustraciones de John R. Neill (1877-1943), que tuvo tanto éxito como El Mago de Oz.
Tiempo después Baum produjo una especie de documental de viajes por el país de Oz que combinaba proyección de diapositivas, cine y actores en directo con su lectura que simulaba un reportaje, proyecto que prácticamente lo llevo a la quiebra.
Para sortear su difícil situación económica, Baum cedió los derechos cinematográficos de varios de sus libros y se produjeron cuatro cortometrajes.
En 1914, con Baum como director, se fundó la Oz Film Manufacturing Company, compañía cinematográfica cuyo propósito era hacer películas de los cuentos de Oz y la cual al poco tiempo cerró.
Luego de este fracaso, Lyman Frank Baum se dedicó a escribir un libro de Oz por año hasta el momento de su muerte, ocurrida el 6 de mayo de 1919.