Pese a su elevado costo, el uso del ruxolitinib o Jakavi se ha incrementado para tratar los casos graves de COVID-19.
La demanda del ruxolitinib o comercialmente llamado Jakavi ha incrementado en las últimas semanas; el medicamento es administrado a pacientes graves de COVID-19, y a pesar de que su costo puede superar los 20 mil pesos, incluso llegar a los 80 mil (dependiendo de la cantidad de comprimidos), las familias hacen todo lo posible para obtenerlo.
Las autoridades señalan que al momento no existe ningún tratamiento para atacar al virus. El secretario de Salud en Durango, Sergio González Romero, explicó que si bien este medicamento ayuda al proceso desinflamatorio que provoca el virus en los pulmones, aún no existe un tratamiento para acabar con el virus.
En las últimas semanas, los llamados de ayuda para conseguir el Jakavi han aumentado en los diferentes grupos de redes sociales, especialmente en Facebook; incluso, los usuarios han sugerido adquirir el medicamento entre varias personas, ya que su costo es muy elevado.
En algunos portales, el precio llega hasta los 80 mil pesos con 60 pastillas de 15 miligramos (mg), mientras que en otros, con la misma cantidad, pero de 5 mg, tiene un precio de 45 mil.
El ruxolitinib se usa para tratar la mielofibrosis, que es un tipo de cáncer que ataca la médula ósea, en el que esta es reemplazada por tejido cicatrizante y provoca disminución en la producción de los glóbulos sanguíneos.
También se usa para tratar la policitemia vera, un tipo de cáncer de la sangre, de crecimiento lento, en el que la médula ósea produce demasiados glóbulos rojos.
Sin embargo, durante la contingencia sanitaria se ha utilizado para tratar a pacientes graves por COVID-19.
"Cualquier anticuerpo monoclonal es de utilidad para la tormenta inflamatoria que sucede en este problema del COVID; sin embargo, como les repetimos día a día, no hay un medicamento que pueda acabar con el virus, estamos atacando los efectos del proceso inflamatorio con los medicamentos que tenemos a la mano", explicó González.
Insistió en que esa no es la solución, sino "seguirnos cuidando todos aun con la vacuna para mitigar y contener la cadena de contagios".
