El gobernador de Coahuila, Miguel Ángel Riquelme, declaró que el reto además de atender la contingencia sanitaria provocada por el COVID-19, ha sido respaldar al empresariado en el estado para que permaneciera en actividad y conservara las fuentes de empleo. (EL SIGLO DE TORREÓN)
El gobernador de Coahuila, Miguel Ángel Riquelme, declaró que el reto además de atender la contingencia sanitaria provocada por el COVID-19, ha sido respaldar al empresariado en el estado para que permaneciera en actividad y conservara las fuentes de empleo.
Destacó que su gobierno diseñó una estrategia de apoyo financiero vía un convenio de colaboración con NAFIN y a través del Programa de Impulso Económico Empresarial Coahuila (PIEEC). A la fecha se llevan autorizados más de 1 mil millones de pesos en créditos.
La medida se emprendió desde el pasado abril del 2020 como forma de apoyo estimular la economía y con el propósito principalmente, que las micro, pequeñas y medianas empresas, (MiPyMes), pudieran sortear la crisis.
Dijo que el Programa de Impulso Económico Empresarial Coahuila (PIEEC), continuará por lo pronto durante todo este año y se maneja a través de la Secretaría de Economía.
Resaltó que por acciones como esta, los efectos de la contingencia no han sido tan devastadores por ejemplo en cuanto a la pérdida de empleos porque con los estímulos económicos se lograron revertir los efectos negativos.
“Y los resultados indican que hemos tomado decisiones atinadas. Somos una de las entidades con la mayor recuperación del empleo formal”, dijo.