Tras los señalamientos que realizó el secretario general del Sindicato Único de Trabajadores de la Construcción y Similares, Margarito Herrera Berumen, en el sentido de que existen arreglos “malsanos” entre autoridades del IMSS y constructores, el delegado del Instituto, José Antonio García, eludió el tema y sólo contestó a través de un comunicado escrito, en donde explica la forma de operación.
Por la mañana de ayer se buscó al Delegado, de quien se informó que se encontraba en el sector de almacenes en esos momentos. También se intentó cruzar información con Elizabeth Guzmán Benavente, jefa de Afiliación y Cobranza, pero tampoco estuvo en su oficina, según se informó en el área de Comunicación Social, a través de su responsable, Violeta Díaz Rodríguez.
El Siglo de Durango pidió una respuesta acerca de las declaraciones que realizó Margarito Herrera, en donde se presume corrupción entre autoridades del Instituto con constructores, sin embargo, horas después el Delegado sólo realizó la contestación por escrito, a través de una “Tarjeta Informativa”.
Cabe recordar que Margarito Herrera dijo que tiene afiliados a unos 2 mil 050 trabajadores de la construcción y que estimó que en el estado existan unos 3 mil 500 de ellos, sin embargo, actualmente sólo están trabajando alrededor de 400 a 500 de ellos, a causa del escaso trabajo que existe por la contracción de la industria de la construcción, a tal grado que incluso muchos de ellos han tenido que regresar a sus lugares de origen y poblados cercanos a la ciudad de Durango, para dedicarse a la agricultura, mientras otros buscan oficios hasta de “globeros” en el parque.
La tarjeta informativa que envió el IMSS explica que a pesar de las cifras que da a conocer Margarito Herrera, están amparados en esta Delegación más de 18 mil trabajadores de la construcción y sus familias, con la Ley del Seguro Social y su Reglamento para los Trabajadores de la Construcción por Obra o Tiempo Determinado.
En este documento también explica que los patrones o propietarios de obras de construcción o intermediarios están obligados a presentar al Instituto dentro de los cinco días hábiles siguientes a la fecha de inicio del trabajo, un aviso en el que se comunica el tipo y domicilio de la obra, así como la fase que se va a ejecutar.
Margarito Herrera comentó el pasado fin de semana que los constructores y autoridades del IMSS se encuentran con “acuerdos”, que provocan el retardo de sus registros, los dejan sin derecho y desamparados en casos de accidentes, con lo que los patrones buscan ahorrarse algo de dinero.
Aseguró el Delegado del IMSS que a través del personal fiscalizador del área de Afiliación y Cobranza hay revisiones permanentes en obras de construcción; se verifican y se exhortan a los contratistas para que afilien a sus trabajadores en forma oportuna y con el salario que corresponde, en caso contrario se procede a mecanismos que obliguen al patrón a garantizar los derechos del trabajador.
También comenta en el documento que se realizan cursos de capacitación a los trabajadores y patrones para que conozcan sus derechos y obligaciones, así como los procedimientos de denuncias de irregularidades, tanto por no afiliación o por un incorrecto salario con el que están registrados.