Hay en nuestro idioma expresiones vigentes que son más conocidas en latín que en nuestro propio español ¡y eso que se supone que el latín es una lengua muerta! Una de ellas es ésa de que nihil novi sub sole que corresponde a “nada nuevo hay bajo el sol”. (1)
“¡Mira nada más cómo vienes…! Le dice la esposa al maestro
Regino, que llegó a su casa borracho, a las dos de la mañana… “Te me largas de aquí, ipso facto…”. (2)
El mentor, (3) que sabe perfectamente que la expresión ipso facto significa “al instante”, contesta: “Me iré de aquí motu proprio, o sea, cuando me dé mi… regalada gana”.
Efectivamente motu proprio significa “por iniciativa o por decisión propia”. (4) Así que, podrían estar muy enojados ambos cónyuges, pero la aplicación que hicieron a esas dos expresiones latinas, es correcta. Por eso le digo que hay muchas expresiones de ese tipo que se incluyen normalmente en nuestro lenguaje de todos los días.
A priori es una de ellas, y lo que se hace a priori, es algo que se hace antes de tener la experiencia, o sea, sin prever los efectos que puede causar ese hecho. En general se usa para decir que algo se hizo antes de tiempo. Su contraparte es a posteriori, cuando una cosa se juzga o se define después de haber sido hecha.
A fortiori no quiere decir que algo se haga por la fuerza aunque así lo parezca. La expresión a fortiori sirve para reforzar lo que se ha dicho y es como decir “con mayor razón”.
Ad libitum quiere decir “libremente” o “a voluntad” (5). Cuando por ejemplo en su trabajo le dan libertad de acción, usted podría decir que hace las cosas Ad libitum, es decir, de acuerdo con su propio criterio.
Ex profeso significa que la acción se realizó con un propósito determinado. “Vine ex profeso para hablar contigo…” por ejemplo. Eso quiere decir que vine especialmente a eso, que ésa es la única intención que me hizo venir.
Grosso modo se usa para decir que no se está dando la información exacta, sino aproximada. “Calculo grosso modo (6) que en este corral hay 500 vacas…”. El dicho correspondiente sería “A ojo de buen cubero…”.
In fraganti significa en el momento mismo del acto. Se aplica en el caso de un delito cuando se sorprende al que lo comete, en el momento mismo de hacerlo. En México lo decimos muy folclóricamente: por ejemplo, cuando la señora pesca al marido “dándose un agasajo” con la ayudante doméstica y más si ella es gordita, la señora le grita: Onésimo… ¡Ahora sí que te pesqué con las manos en la masa…!
Por si las dudas
1.- Nada nuevo. Nada nuevo hay bajo el sol, y bajo la luna, menos.
2.- Ipso facto. Es como decir ¡a la voz de ya!
3.- Mentor. El mentor no mienta nada. Es el instructor, el maestro.
4.- Motu proprio. Lo correcto es decir: “hizo esto motu proprio” y no “hizo esto de motu proprio” (la preposición DE no va) Además fíjese que dice proprio y no propio.
5.- Ad libitum. Se pronuncia líííbitum como palabra esdrújula, con acento en la primera í, pero no se le pone el acento gráficamente porque es latín y el latín no tiene acentos.
6.- Grosso modo. Se dice por ejemplo “es un cálculo grosso modo” y no “es un cálculo A grosso modo”. La preposición A no debe ir.
Pregunta: ¿Cuál es la diferencia entre pudor y pundonor?, Ana Ma. Garibay. Cd. Lerdo.
Respuesta: Pudor tiene relación con el decoro en el comportamiento o en el vestir. Pundonor se relaciona con el honor. Puede haber un futbolista que tenga mucho pundonor para jugar, pero muy poco pudor en el vestidor, para vestirse o desvestirse delante de los demás.
De remate:
Frase muy filosófica para ponerse a pensar: Cuando veas que se acerca un gigante, fíjate en la posición del sol. Puede ser la sombra de un enano. ¡Hasta mañana!