Una ex empleada de Jackson asegura no haber escuchado nada malo del cantanteAP
SANTA MARÍA, CALIFORNIA.- Una ex empleada de la mansión Neverland de Michael Jackson subió ayer al estrado para disputar el testimonio de una criada que acusó al cantante de manosear al actor Macaulay Culkin y a otros muchachos.
Francine Contreras, que trabajó en la mansión entre 1991 y 1993, dijo que mientras trabajó con la criada Adrian McManus nunca escuchó decir nada malo acerca del cantante.
Con el testimonio comenzó la primera semana completa en que el caso es presentado por la defensa. Previamente, dos adolescentes testificaron la semana pasada que cuando eran niños durmieron en la misma cama con Jackson y éste no abusó de ellos. Sus madres dijeron que tenían confianza suficiente al cantante como para permitir a sus hijos dormir en su alcoba.
Jackson llegó poco antes de reanudarse el testimonio, escoltado por un ayudante que portaba un paraguas, y acompañado por sus padres y por su hermano Jermaine.
McManus, llamada por la fiscalía, dijo que vio una vez a Jackson besar a Culkin en una mejilla, mientras su mano descansaba en la parte posterior de Culkin. Ella describió escenas similares con otros niños.
Culkin, quien era un invitado regular a Neverland a comienzos de la década del noventa, podría figurar entre los testigos de la defensa. El astro de la serie Mi Pobre Angelito tiene ahora 24 años.
La cuestionan
La credibilidad de la ex empleada, Adrian McManus, fue cuestionada por los abogados de la defensa de Michael, que mostraron que ella y su esposo defraudaron a tres niños en más de 30 mil 500 dólares. En otra demanda judicial, se le ordenó pagar 30 mil dólares por robar un bosquejo de Elvis Presley hecho por Jackson y venderlo a un tabloide.
La fiscalía, por su parte, intentó poner en entredicho el carácter de Contreras al preguntarle si no había sido procesada por haber robado objetos en su siguiente empleo en una tienda por departamentos. Contreras respondió que había sido procesada por ingresar sin autorización en una propiedad ajena, no por robar.
Jackson, de 46 años, es acusado de abusar sexualmente de un niño de 13 años. Si bien admite que varios niños solían dormir en su cama, dijo que no era con propósitos sexuales.