MÉXICO, DF.- Ayer acabó oficialmente la aventura del goleador mexicano Jared Borghetti en el futbol árabe. El delantero quedó como jugador libre después de que se hiciera efectiva una cláusula de su contrato que indicaba tal posibilidad en caso de que Borgetti no se adaptara por completo a las condiciones socio-culturales de Arabia Saudita una vez que hubiera pasado el primer semestre de la temporada.
?Si el jugador no llegaba a adaptarse a las circunstancias de la vida familiar y privada, tendría oportunidad de salir?, aseveró Heriberto Sanmartín, representante de Jared.
?Era una cláusula que antecedía el contrato, no querían que se fuera, pero ni hablar, estaba estipulado en el contrato y era un arreglo que se había tomado desde un inicio. Lo dejamos muy claramente porque no sabíamos cómo iba a ser la vida allá?.
Ante tal situación, Jared puede contratarse con cualquier equipo del mundo sin necesidad de que éste pague los dos millones de dólares de la rescisión de contrato, misma que hasta ayer estaba vigente.
La relación de Jared con el Al-Ittihad quedó en buenos términos, aunque a los dirigentes árabes les sorprendió la decisión del sinaloense, quien había anotado diez goles con la casaca de los ?Tigres de Jeddah?.
Además, apenas ayer el jeque propietario del Ittihad, Mansour Al Balawi, había firmado un acuerdo con el presidente del Barcelona, Joan Laporta, para que ambos conjuntos jugaran un amistoso el próximo año, por lo cual Al Balawi quería especialmente que el máximo goleador de la Selección Mexicana permaneciera en el equipo árabe.
Contrario a lo que sucedió en el caso de Bruno Marioni con el Toluca, en el que el jugador tuvo que compensar económicamente a los Diablos por el tiempo que no cumplió de su contrato, Sanmartín aseguró que Borgetti no se vio obligado a desembolsar dinero alguno debido a que así se estipuló desde el inicio.
