Para evitar fricciones entre los padres y los hijos adolescentes, los psicólogos recomiendan mejorar la comunicación.
‘El hijo adolescente busca más independencia, pero al mismo tiempo no quiere responsabilidades’
TORREÓN, COAH.- Cuando una persona alcanza la adolescencia, inicia su lucha por la individualidad, por diferenciarse de sus padres y encontrar su propia identidad, tratar de ser distinto a lo que hay en el hogar, señala la psicóloga, Gabriela Reyes.
“En esta etapa es cuando existen más roces entre los papás y los hijos, especialmente en el caso de los varones con el padre, donde el primero trata de echarle en cara al segundo todas sus incongruencias mientras que el papá busca de alguna manera mantener el control sobre el hijo rebelde”, manifiesta.
Refiere que éste es el camino hacia una relación de adultos entre padres e hijos, que tiene que ver con las modificaciones que sufra este último, su desarrollo personal y la tolerancia de sus progenitores al respecto, así como la paciencia y serenidad para aceptar lo que no les parece del hijo adolescente.
“El hijo busca más independencia pero al mismo tiempo, no quiere responsabilidades, en ocasiones se comporta como niño y luego quiere que le traten como adulto, es un estira y afloja con los papás que requiere de mucha paciencia y comprensión de los padres”, expone.
La psicóloga señala que la relación entre el padre y el hijo varón con frecuencia se vuelve un poco tensa debido a la constante lucha de poder que ya de por sí existe y porque los hijos rechazan verse reflejados en la imagen del padre, ya que quieren encontrar su propio camino.
“El construir un proyecto de vida personal propio lo pone ante múltiples alternativas y aprender que la suya no es ni la misma ni la opuesta a la que los padres le indican, lo enfrentan con la duda y la incertidumbre”, dice Gabriela Reyes, “el adolescente reclama a sus padres más autonomía pero dada su inseguridad, no necesita autonomía completa, pues lo sentiría como un abandono”.
La psicóloga dice que lo más recomendable es que los papás establezcan límites al adolescente e intervengan cuando lo consideren necesario, pero que al mismo tiempo de que responden sus dudas también alienten su independencia.
Comunicación, la clave
Para la psicóloga, la mejor forma de ayudar a un hijo adolescente es fomentar una buena comunicación con los padres.
-Los papás deben tomar la iniciativa para acercarse a su hijo adolescente.
-Mantener abiertas todas las líneas de comunicación.
-Escuchar antes de hablar.
-No minimizar sus problemas.
-Darles la oportunidad de hablar libremente.
FUENTE: Gabriela Reyes, psicóloga
