Especialistas consideran que el Gobierno del presidente Felipe Calderón ha retomado ofertas de campaña de Andrés Manuel López Obrador, para obtener legitimidad y materializar su "rebase por la izquierda".
EL UNIVERSAL
MÉXICO, DF.- A finales de enero de 2006, el entonces candidato presidencial Felipe Calderón Hinojosa comenzó la emisión de un programa radiofónico. Andrés Manuel López Obrador, abanderado de la coalición Por el bien de todos, quien ya tenía un programa televisivo de campaña, se rehusó a escuchar a su adversario.
?Me va a dar un poco de flojera eso (?) lo cierto es que nos están copiando en varias cosas?.
López Obrador, como parte de su oferta electoral, ofreció reducir el salario del presidente de la República a la mitad y procurar que nadie ganara más que el mandatario.
Planteó incorporar al Ejército en las tareas del combate al narcotráfico y la delincuencia organizada, previa reforma a la Constitución, y prometió reducir el precio del gas y de las gasolinas, sobre todo a la población de escasos recursos.
Meses después, en agosto, cuando el conflicto post electoral se encontraba en plena ebullición, desde el rancho del hoy subsecretario de Gobernación Abraham González, a lado del entonces gobernador de Jalisco, Francisco Ramírez Acuña, hoy secretario de Gobernación, Calderón Hinojosa advirtió:
?Ellos piensan que caeremos en su provocación, lo que no saben es que desde el Gobierno los vamos a rebasar por la izquierda, vamos a hacer justicia y justicia en serio en nuestro país?.
Ya en el Gobierno, el presidente Felipe Calderón Hinojosa ha retomado ofertas de campaña de Andrés Manuel López Obrador, para obtener legitimidad y materializar su ?rebase por la izquierda? a su ex adversario en la contienda presidencial de 2006, considera el politólogo Alberto Aziz Nassif, del Centro de Investigación y Estudios Sobre Antropología Social (CIESAS).
?Hay problemas tan obvios en el país que Calderón tiene que coincidir con otros partidos?, estima Carlos Martínez Assad, del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM.
En el arranque de su sexenio, Calderón puso en marcha un plan de austeridad en el Gobierno Federal y redujo su salario en diez por ciento, igual que el de altos funcionarios; también comenzó con operativos de seguridad en los estados más afectados por la violencia del narcotráfico, apoyado principalmente en el Ejército.
Antes de partir de una gira por Europa, el presidente Calderón puso en marcha el programa Oportunidades Energético, mediante el cual se apoyará a cinco millones de familias mexicanas con 25 por ciento de lo que gastan en el consumo de energía.
?Es como la agenda light de Calderón?, apunta el académico del CIESAS.
?En la medida que cubre un espectro amplio de inquietudes ciudadanas se beneficia (Calderón). Eso es lo que califica a un presidente como un verdadero estadista (?) que haya posibilidades reales de que los ciudadanos podamos ser escuchados y el Estado retroalimente sus funciones que traen un beneficio a mediano y largo plazo, para consensos. Calderón llegó con el menor número de votos en la historia, por ello tiene que ganarse un consenso en la sociedad para poder gobernar?, explica Martínez Assad.
?El problema es seguirle la pista, ver si realmente se van a hacer (las propuestas) y si no son nada más una cuestión muy publicitaria?, expuso Aziz Nassif.
?Todos estos temas están encaminados a generar y a ganar legitimidad por parte de Calderón, porque es un Gobierno con un importante déficit de legitimidad por la forma como se dio todo el proceso electoral y post electoral?, añade el académico del CIESAS.
Para Aziz Nassif, en conjunto ?sí se están retomando puntos de la agenda de López Obrador, lo cual puede ser positivo si se hacen los proyectos. Retomar puntos de la agenda de la Oposición puede ser inteligente siempre y cuando no nada más sean farolazos o golpes espectaculares en los medios?.
Carlos Martínez sostiene que ?no veo riesgos para Calderón por retomar esta agenda. Al contrario, en la medida que atiende demandas de grupos diferentes podrá crecer como Presidente de la República. Yo lo que veo son principalmente ganancias?.
René Jiménez Ornelas, experto en seguridad pública del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM, sin embargo, sí ve riesgos en la línea seguida por el presidente Calderón, pero no por retomar banderas de la Oposición, por incorporar al Ejército en la lucha contra la delincuencia organizada.
?Independientemente de que sea bandera de López Obrador, en realidad es un cuchillo de doble filo por las expectativas tan grandes de incorporar al Ejército y a las policías. De no tener éxito el boomerang se revertirá a las Fuerzas Armadas. Eso es lo que veo riesgoso?, sostiene Jiménez Ornelas.
Copias edulcoradas: Ortiz Pinchetti
José Agustín Ortiz Pinchetti, colaborador de López Obrador, considera que hay una ?imitación sistemática? a los planes que tenía el ex candidato presidencial, y que Calderón consideraba ?como un peligro para México?.
El político perredista afirma que Calderón actúa ?con ideas edulcoradas, disminuidas?.
Miembro del equipo de López Obrador, Ortiz Pinchetti comentó que Calderón ?intenta desviar la atención pública de lo fundamental, que es su trabajo a favor de los grandes capitales y los monopolios a los que no toca ni con el pétalo de una rosa, como sucede con el problema de la tortilla?.
El objetivo de Calderón es ?tratar de desviar la atención cuando en el fondo su política económica sigue siendo tan mala como la de los últimos 24 años y de que el llamado presidente del empleo será del desempleo?.
Según Ortiz Pinchetti, ?trata de engañar a la gente pensando que él les puede proporcionar lo que ofrecía López Obrador?.
