Alonso Álvarez ganador del premio Special Cannes 2008, otorgado en el marco del Short Film Corner por su filme Historia de un Letrero, aseguró que este premio es un gran logro, sobre todo después de que lo rechazaron en los festivales de Morelia y Guanajuato.
El realizador, quien reside en Tampico, Tamaulipas, agregó que se siente muy satisfecho con el reconocimiento que ha tenido su trabajo sobre todo porque no estudió la carrera de cinematografía, ya que en el Centro Universitario de Estudios Cinematográficos (CUEC) no lo admitieron.
“Es increíble (ganar el premio), todavía no siento que sea real, la verdad nunca pensamos en llegar a ganar, aún sigo sin poner los pies en la tierra. Estamos muy contentos y agradecidos porque aunque se oiga muy trillado no lo hicimos por llegar a ningún lugar, lo único que queríamos era llevar un buen mensaje, llegar al corazón de la gente.
Alonso Álvarez, declaró en entrevista radiofónica con Joaquín López-Dóriga que “Yo nunca estudié cine, de hecho me cerraron las puertas en todas las escuelas de cine de México, no se me admitió. Pero me quedé con ganas de hacer algo y decidí hacer historias con el potencial de ayudar a la gente”.
El cineasta compitió en Cannes con dos mil cortometrajes del mundo y ganó el premio gracias a su trabajo Historia de un Letrero. El joven considera que su trabajo es una “cachetada con guante blanco a nuestra sociedad, donde la clase marginada está ahí pero decidimos no verla”.
Aunque emocionado por el galardón, Álvarez no podrá estar en Cannes para recogerlo, pues no tiene dinero para el traslado. Tampoco sabe quién recibió sus premios, consistentes en una cámara fotográfica y una computadora portátil.