La intención de este almanaque, añadió, también es denunciar a los sacerdotes pedófilos y dirigir un llamado a la Iglesia para que acabe con el celibato en los sacerdotes.
Bien se sabe que la vida da muchas vueltas. En el caso de Letizia Cerchia, la monja que colgó el rosario para convertirse en modelo, se puede decir que su vida dio, quizás, demasiadas vueltas.
De niña comenta, asistía diariamente a la iglesia. Hace 15 años ingresó a un convento de Anzio, cerca de Roma, porque su único deseo era ser monja. Ahí, dice, fue abusada sexualmente por el que consideraba su padre espiritual.
Letizia decidió abandonar el convento por su desilusión al conocer de cerca el clero y su vida tomó otro rumbo muy espectacular.
Nunca habló de lo sucedido con su padre, un militar de la guardia fiscal, ni con su madre, quienes hasta hoy no habían entendido el motivo de su decisión.
Letizia se dedicó a estudiar y se graduó en Biología. Se casó y tuvo una niña, que ahora tiene cuatro meses.
Este cambio de vida, sin embargo, no habría sido noticia. Hace unos meses Letizia contactó al fotógrafo italiano Alberto Magliozzi, conocido por sus campañas de denuncias, a veces muy controvertidas, y tomó una decisión que sí sería noticia, es decir, posar desnuda para un calendario.
Letizia afirmó que su única intención es lanzar un mensaje fuerte a los moralistas, por un lado, y a todas las víctimas de abusos sexuales, por parte del clero, explicó la ahora modelo en una entrevista telefónica para Televisa.
“Quería ser útil y poner mi experiencia al servicio de los que aún sufren en silencio”, comentó.
Según Letizia, su cuerpo es el mejor instrumento para comunicar que la belleza es un don que hay que mostrar y mirar sin malicia.
La intención de este almanaque, añadió, también es denunciar a los sacerdotes pedófilos y dirigir un llamado a la Iglesia para que acabe con el celibato en los sacerdotes.
Por su parte, Alberto Magliozzi apuntó que su trabajo fotográfico le ha causado dolores de cabeza como sucedió con el almanaque Madonne, donde aparecen 12 mujeres desnudas en escenas inspiradas en la vida de Cristo, casi le valió la excomunión.
