Brady podrán fin a una racha de 128 partidos consecutivos que salió como titular con el equipo para establecer la tercera mejor marca en la historia de la NFL. (AP)
La grave lesión de ligamentos que sufrió ayer, domingo, el mariscal de campo de los Patriotas de Nueva Inglaterra, Tom Brady, le obligará a pasar por el quirófano y a perderse toda la temporada de la Liga Nacional de Futbol Americano (NFL).
Inclusive, los doctores tampoco le aseguran que si su equipo llegase a disputar de nuevo el Super Bowl pudiese estar con el resto de sus compañeros para ayudarles a conseguir el título.
El Jugador Más Valioso (MVP) de la pasada temporada será colocado en la lista de lesionados, un día después que sufrió una fuerte torcedura de la rodilla izquierda en la mitad del primer cuarto del partido inaugural de la nueva temporada de la NFL que disputaron los Patriotas contra los Jefes de Kansas City.
En un comunicado dado a conocer hoy, lunes, por el equipo antes que el entrenador Bill Belichick diese una rueda de prensa, se confirmó que Brady tendría que pasar por el quirófano para reconstruir la rotura de su ligamento anterior cruzado de la rodilla izquierda.
Brady podrán fin a una racha de 128 partidos consecutivos que salió como titular con el equipo para establecer la tercera mejor marca en la historia de la NFL.
La lesión de Brady se la produjo cuando el defensor Bernard Pollard, de los Jefes, lo agarró por la pierna lesionada y lo derribo en una jugada de ataque de los Patriotas, que al final ganaron el partido por 17-10.
"Lo único que podemos decir es que nos sentimos mal por la lesión de Tom", declaró Belichick, que confirmó la gravedad de la lesión. "Siempre odias ver que alguien se lesiona de esta manera, especialmente cuando hay un jugador como Tom que trabajo más duro que nadie durante el verano para estar en plena forma".
El entrenador de los Patriotas no quiso comentar sobre la acción de Pollard, pero dijo que a sus jugadores siempre les ha dicho que "sean responsables cuando golpean a los mariscales de campo por debajo de la rodilla y de los hombros".
Belichick se ha decidido por el mariscal reserva Matt Cassel como el sustituto de Brady, que ya lo hizo en el partido ante los Jefes y los llevo al vigésimo triunfo consecutivo en la competición de la temporada regular.
Cassel será el titular de los Patriotas el próximo domingo cuando se enfrenten de visitantes ante los Jets de Nueva York, en el Giants Stadium de East Rutherford (Nueva Jersey).
"Como equipo tenemos que salir el campo y hacer cada uno nuestro trabajo", comentó Belichick. "Eso nunca cambie, al margen de que jugadores son los que luchan por el triunfo".
Sin embargo, la ausencia de Brady no es la de un mariscal cualquiera sino para muchos el mejor durante los últimos años como los demuestra que ha logrado tres títulos de Super Bowl desde el 2001 y volvían a ser el equipo favorito a luchar por otro anillo, que el año pasado perdieron ante los Gigantes de Nueva York.
El propio Cassel ya dijo que no llegaba al puesto de titular para ser un segundo Tom Brady sino para hacer su trabajo con las características que tiene su juego.
"No voy a tratar de ser Tom Brady, simplemente lucharé al máximo para ser el mejor Matt Cassel", subrayó el nuevo mariscal titular de los Patriotas, que se formó en la universidad de Southern California.
Por su parte, Belichick, considerado uno de los entrenadores de la NFL que mejor sabe guardar todos los movimientos que piensa hacer, negó los informes periodísticos en los que se comentaba que los Patriotas podrían estar buscando un nuevo refuerzo para que ocupase la baja de Brady.
"En respuesta a los comentarios que ya han comenzado a circular, nadie dentro de la organización ha hecho gestiones para buscar un nuevo mariscal", declaró Belichick. "Hemos recibido llamadas para valorar esos comentarios y la respuesta sido negativa".
Belichick, de momento, confía en Cassel, para quien tendrá que trabajar un nuevo plan de trabajo en el campo con el que espera sorprender a los equipos rivales.
"Las oportunidades que Matt tuvo le van a ayudar de cara al futuro y mantengo una gran confianza en su juego", reiteró Belichick.
Pero Brady, de 31 años, la pasada temporada estableció una nueva marca en la NFL con 50 pases de "touchdown" en lo que fue la temporada regular perfecta para los Patriotas y disputaron el cuarto Super Bowl en ocho años.
La derrota en los últimos segundos por 17-14 ante los Gigantes les impidió concluir la competición con marca perfecta de 19-0, algo que fue frustrante para el equipo, como lo ha sido también el perder a su jugador estrella que los deja con un gran reto por delante.
