Consentidos. El PRI busca aumentar al máximo el presupuesto para sus 19 gobernadores. En la imagen el mandatario coahuilense Humberto Moreira, junto a la lideresa Beatriz Paredes.
MÉXICO, DF.- En medio de la crisis económica y los recortes a las finanzas públicas, el PRI no sólo quiere asegurar el presupuesto de sus 19 gobernadores, sino aumentar la tajada al máximo.
De acuerdo con el "Plan de Emergencia" que negocia la cúpula priista, la intención es que los gobernadores se apoderen de los recursos federales contenidos en dos fondos, un fideicomiso y hasta las ganancias que se obtienen por las coberturas que contrató la Secretaría de Hacienda para el precio del barril de petróleo.
"Los recursos obtenidos por coberturas del precio del barril del petróleo deberán formar parte de la Recaudación Federal Participable", se indica en el proyecto, en manos de la presidenta del PRI, Beatriz Paredes, y del coordinador de los senadores, Manlio Fabio Beltrones.
En el documento se indica que para acelerar el ejercicio del gasto de inversión es necesario utilizar la capacidad de ejecución de los estados. Para ello proponen realizar las reformas necesarias para que se transfiera "en su totalidad a los estados y municipios" los excedentes petroleros etiquetados para el Fideicomiso para la Infraestructura de los Estados (FIES) y el Fondo para los Programas y Proyectos de Inversión en Infraestructura (FOPPII).
Pretenden transferir, también en su totalidad, los recursos del Fondo de Estabilización de los Ingresos de las Entidades Federativas (FEIEF) a manos de los gobernadores, con el argumento de que ese dinero será utilizado para compensar "los crecientes problemas de liquidez de las entidades" derivados de la caída en las participaciones federales.
SUBEJERCICIOS
Entre los planes de los legisladores, dirigentes y mandatarios del tricolor, se incluye la intención de convenir que las obras federales "con importantes retrasos en su ejecución" puedan ser realizadas por el Estado y no por el Gobierno del presidente Felipe Calderón.
Adicionalmente, se pretende que "de manera temporal" la federación sea la única que realice depósitos de los programas que deberían ser financiados por ambos niveles de Gobierno.
Entre los ajustes al presupuesto federal, el PRI propone la desaparición de las delegaciones federales de las secretarías de Educación Pública, Desarrollo Social y Agricultura, para poder traspasar esas facultades y recursos, vía participaciones, con la finalidad de evitar duplicidad en las estructuras administrativas y operativas.
