Sexy Piscis luchador por accidente

De risa sincera y contagiosa, Alfredo Gallegos, mejor conocido como Sexy Piscis en el barroco mundo de la lucha, es un hombre alto y atlético que emana alegría en cuanto sale al cuadrilátero a luchar.

Cuando Piscis abandona el vestidor de los técnicos los piropos y chiflidos inundan las arenas.

Normalmente enfundado en unas mallas color beige, botines negros, traje negro con un par de diminutas piedras brillosas al frente y un discreto escote en la espalda, una banda color negro en la cabeza que sostiene su corta cabellera, maquillaje, pestañas, sombra, “blush” y unos labios rojos pasión que realzan su rostro, Sexy siempre hace gala de elegancia al dirigirse al ring arropado por su público: niños, mujeres y hombres que por igual lo siguen.

n ¿Cómo nace Sexy Piscis en la lucha libre?

Me inicié en la lucha libre por un coraje con mi mamá. Fue un coraje con mi mamá y no pude desquitarme con nadie, un ser humano no puede pegarle a su madre, porque es su madre, y ahí empezó todo. Como vivo a tres cuadras de la Arena Olímpico, caminé y caminé y de eso surgió todo para mí. Un enojo con mi madre lo transmití a la lucha y me gustó y me gustó y desde entonces aquí estoy gracias a Dios y a ella, y a mí esfuerzo y a mi público. Y el luchador suelta una carcajada que contagia y que él mismo denomina “la risa de Mumm-Ra”, el malvado de la caricatura Thundercats, los felinos cósmicos.

n ¿Por qué decides ser exótico?

Toda mi vida siempre he sido así, te imaginas que yo ande con máscara haciendo todo esto – vuelve la risa contagiosa-, pues no, soy lo que soy y no sé quién me mandó si Dios, la tierra, o no sé, me imagino que Él, no sé si Él me mandó así o yo me hice. Nunca pensé en ser rudo o técnico, el exótico a todo le tira.

Previo a que Alfredo tomara la decisión de dedicarse al mundo de las llaves y las tres caídas, imitaba a Alejandra Guzmán a quien considera su ídolo: “a mí siempre me ha gustado, me gustan sus canciones, me gusta todo. Antes de luchar me dedicaba a dar shows, iba a una fiesta y me vestía de mujer y era como imitación a Rocío Durcal, a Tatiana, a equis, a cualquier personaje o artista, inicié a imitar a los 13 años y a los 15 lo dejé”.

n ¿Cómo eliges tu vestuario?

Lo elijo yo solo, imaginándome como va esto, qué le puedo poner, y ahí le voy poniendo si me gusta lo dejo o sino le hago cambios y hasta que me salga algo bonito. De repente me imagino las cosas y le pongo o le quito, mi hermana es la que me cose los trajes.

Besos robados

n Los besos que repartes en la arena te han hecho famoso, ¿son los besos el momento más esperado y singular de Sexy Piscis?

Del público también, de los dos (ríe). En este vestidor soy todavía Alfredo, un ser humano igual que todos, pero cuando voy saliendo de aquí ya soy Sexy Piscis; y ya soy otro.

Sexy dedica tiempo a su arreglo previo a los combates, pinta sus ojos, peina su cabello, coloca su traje hasta la cintura y encima una playera, sólo momentos antes de salir al ring se despoja de ésta y acomoda su atuendo. Sexy sin duda ha marcado tendencias en su indumentaria.

n ¿Cómo es un día normal en la vida de Alfredo?

Normal como cualquier ser humano. Me levanto, me lavo la cara, recojo, el almuerzo, voy con mi sobrina y entre los dos hacemos el almuerzo la comida, normal, no hay nada diferente.

n ¿Qué opina la familia del trabajo de Sexy Piscis?

Me apoya muy bien y me dan ánimo para salir adelante. Me dan muchos consejos muy bonitos pero no es muy fácil que los agarre yo, pero creo que tengo que poner los pies sobre la tierra para agarrar todos esos mensajes que me da mi familia.

n ¿La familia acude a tus luchas?

Sí, cuando tienen tiempo porque trabajan todos, pero sí, de repente vienen.

n ¿Luchar junto a quién ha sido la experiencia más grata para ti?

Cuando luché contra Dr. Wagner Jr. en una disco de aquí, y con LA Park, con el japonés Okumura, con Pimpinela, con Cassandro, con varios, ha sido toda una experiencia para mí enfrentarme a ellos porque yo nunca me imaginé que la lucha libre me fuera a llevar hasta donde me tiene ahorita, enfrentarme a los mejores del mundo.

En este mes, Sexy cumplirá sus primeros 16 años como luchador exótico, un recorrido que se escribe fácil, pero que hacen falta un sin número de componentes para lograrlo: dedicación, entrenamiento, agilidad, humor, personalidad, originalidad, todos esos elementos que distinguen a un favorito de las tres cuerdas.

Desde la tercera cuerda

n ¿Qué aprendizaje para tu vida te ha dejado la lucha libre?

La disciplina más que todo, la disciplina en este deporte y en la vida.

n ¿Qué tipo de mensaje tratas de transmitir a los aficionados como profesional del pancracio?

Pues que siempre vengan y disfruten de este deporte que es muy rudo para la mujer y para uno, pero que sigan adelante y vengan.

n ¿Cuáles son los ingredientes que conforman a un líder de la lucha?

Deben tener muchas hazañas, mucha hambre y ser un buen maestro en la lucha libre para que eso se pueda sentir.

n ¿Cuál es el regalo más bonito que te ha dejado este deporte?

Ser campeón de parejas con el Piloto Suicida, entre muchas cosas más.

nY a tu vida, ¿qué te ha dejado la lucha libre?

Me ha enseñado a ser humano, a poner los pies sobre la tierra, y pensar que en esta vida lo que se tenga no importa en este deporte.

Sexy Piscis considera que en la actualidad los luchadores exóticos son observados de otra manera, que se percibe un cambio de años atrás a estas fechas, “ha cambiado mucho gracias a mi esfuerzo, a mis compañeros que entrenan conmigo y yo entreno con ellos, me dan la mano arriba y yo también, pero a los técnicos, estamos hablando de técnicos, porque los rudos chale, fuera de aquí. El ambiente yo lo voy sacando, saco llave tras llave, todo lo que te dejaron tus maestros para entrenar más y hacerlo mejor”.

La sencillez con la que habla Alfredo, Sexy Piscis, se equipara a la agilidad con la que se desenvuelve en el pancracio, a los aplausos que recibe después de cada lucha, a los piropos a todo pulmón que emiten sus seguidores, a los besos robados arriba y abajo del ring, a las frases graciosas que grita en sus actuaciones, a todo el folclor que enmarca la lucha libre mexicana.

Sexi Piscis ha marcado una pauta en la lucha libre, llaves, besos y un especial cuidado en su arreglo son parte de su originalidad y distinción entre el rudo mundo de las tres caídas, que por ahora, lo llevan a celebrar sus primeros 16 años en el ring.