El titular del Ejecutivo federal dejó en claro que el enemigo común es el crimen en todas sus expresiones.
El presidente Felipe Calderón Hinojosa pidió al Congreso una mayor asignación de recursos en el paquete económico de 2011 a nivel federal, estatal y municipal para las tareas de seguridad, así como mantener una tarea que permita la mejora permanente del marco legislativo en la materia.
Expuso que, en un contexto de recursos limitados, es necesario explorar las posibilidades para financiar esos recursos, y pidió identificar los programas que no han dado los resultados esperados y reasignar montos, pues de otra manera 'lo que tendría que hacer el Estado sería buscar nuevas fuentes de ingreso, lo cual constituiría una carga para los contribuyentes'.
En el Diálogo por la Seguridad. Hacia una Política de Estado, en esta ocasión con coordinadores parlamentarios -a excepción del PRI, del PT y del líder de los diputados del PRD- afirmó que la participación del Congreso es 'crucial' para dar un renovado ímpetu y profundidad a la transformación de los sistemas de procuración de justicia y seguridad.
Reiteró que las diferencias no debilitan ni desprestigian a la política, 'lo que daña profundamente a la nación es que la política no pueda trascender esas diferencias'.
Manifestó su total apertura al diálogo sin tabúes ni temas prohibidos, pues la lucha contra la criminalidad exige de todos conciencia y compromiso, valentía y decisión, unidad y acción y 'eso es cierto para quienes desempeñamos una tarea pública'.
En el Casino Militar del Campo Marte, el titular del Ejecutivo federal dejó en claro que el enemigo común es el crimen en todas sus expresiones, y subrayó que el diálogo 'no supone renunciar a las tesis que nos distinguen', ni sacrifica el juicio crítico sobre la realidad o sobre la acción de los gobiernos.
Exhortó a que trascendiendo las naturales presiones, inercias e intereses legítimos que hay en las bancadas y partidos, se revisen los análisis del Consejo Nacional de Evaluación (Coneval) para buscar cuáles programas tienen menos rentabilidad social y económica, cual es más regresivo, y si es el caso reasignar recursos a los programas de seguridad.
Reconoció que dotar de mayores recursos a la federación, a los estados y a los municipios es importante, pero no será suficiente para ganar esta batalla, pues se necesitará también que los montos sean vinculados a resultados y al cumplimiento de compromisos, porque sólo con transparencia y rendición de cuentas se evitarán desvíos o una administración insuficiente.
Señaló que para una mejora permanente del marco normativo en materia de seguridad, pedirá que se pueda analizar, discutir, enriquecer y, si así se considera, aprobar algunas iniciativas que siguen en curso en el Congreso de la Unión, tras haber sido presentadas.
Entre ellas, dijo, se encuentra, por ejemplo, el proyecto que reforma el Código de Justicia Militar, de manera que se sancione penal y severamente a los miembros de las Fuerzas Armadas que traicionen a los suyos y se incorporen a la delincuencia organizada, entre otros supuestos.
También, el proyecto por el que se reforma la Ley de Seguridad Nacional que está en trámite legislativo y destacó que es importante que el resultado sea una ley que con pleno respeto a las Fuerzas Armadas, les brinde mayor certeza y seguridad a todas las autoridades sobre sus responsabilidades, sin vulnerar los derechos de los ciudadanos.
Se refirió también a la reforma a la Ley Federal de Armas de Fuego que busca incrementar las restricciones a la portación y posesión de armas de fuego y cartuchos, la Ley para Prevenir y Sancionar los Delitos en Materia de Secuestro, porque es de los que más agravian a la sociedad y para responder al clamor de la ciudadanía.
El presidente Calderón habló además de que se deben abordar las reformas a los Códigos Penal y de Procedimientos Penales para sancionar delitos que atentan contra la vida, la integridad y la seguridad personal de los familiares de los servidores públicos de instituciones de seguridad y de candidatos de elección popular.
Anunció que en los primeros días del próximo periodo de sesiones, que inicia el 1 de septiembre, pondrá a su consideración la creación de la policía con mando único estatal, que es una propuesta que ha surgido, precisamente, tanto en el Consejo de Seguridad Pública como en la Conferencia Nacional de Gobernadores.
Dio a conocer que también someterá al Legislativo una ley para prevenir el lavado de dinero, que verdaderamente dañe las estructuras financieras de la delincuencia; y una más para imputar corresponsabilidad a integrantes de bandas criminales en los delitos cometidos por las mismas, y así cerrar espacios a la impunidad, pues las 'lagunas' de la ley hacen posible que criminales pisen rápidamente las calles a pesar de haber sido detenidos.
El mandatario dijo que tienen frente a sí la oportunidad histórica de cambiar el destino del país en la materia, y construir una nueva institucionalidad cuyos efectos sean permanentes y beneficien a las futuras generaciones de mexicanos.