Cristopher Pollet es uno de los organizadores de la porra de Uzbekistán, que ha contagiado al resto de la afición en La Laguna. (Enrique Terrazas)
En el Estadio Torreón, la afición se vistió de azul. Nadie sabe por qué Uzbekistán se convirtió en el equipo de casa, pero en la tribuna, las porras y los gritos son para los jugadores que llegaron de Asia Central.
La afición simplemente eligió a los uzbekos. Su apoyo traspasó la tribuna y llegó hasta las redes sociales como Facebook y Twitter. Tal vez por eso, los jugadores lograron remontar un marcador adverso para hacer historia y llegar por primera vez a los octavos de final en el Mundial Sub 17.
Cristopher Pollet es uno de los organizadores de la porra de Uzbekistán. Él y otros 20 jóvenes han contagiado al resto de la afición y gracias a ellos la selección asiática es el equipo de casa.
Ahora este grupo de amigos es conocido como "La POU" (Porra Oficial de Uzbekistán). Desde la tribuna echan porras, dicen palabras soeces, chistes y cualquier ocurrencia con tal de motivar a su equipo para que juegue bien al futbol.
"Desde que se organizó el sorteo del Mundial Sub-17 y supimos que Uzbekistán iba a estar en Torreón, no sé por qué decidimos apoyarlos. Fue espontáneo hacer un grupo de amigos para ir a echarles porras", dice Christopher Pollet.
Quizá los escogieron porque parecía ser el equipo más débil y porque Estados Unidos y República Checa tienen mayor reconocimiento. "Aunque al final demostraron que son los más fuertes. Como todos los mexicanos, quisimos ser buenos anfitriones con Uzbekistán".
Christopher además es el TLO de Uzbekistán, es decir, el guía y encargado de hacer sentir bien a los jugadores. Les hace saber del apoyo de los laguneros y también funge como traductor porque los seleccionados hablan ruso y uzbeko, pero algunos también inglés, y así logran comunicarse.
"Ellos están muy felices en Torreón y la porra que organizamos les ha parecido genial. Esto les ha ayudado mucho a avanzar y así me lo han dicho, por eso el miércoles (hoy) nos van a dedicar el juego contra Australia".
Cada vez que los uzbekos anotan un gol van y celebran con la afición lagunera. Sus rivales saben que los asiáticos son los favoritos. Lo sienten cuando escuchan cada grito, cada grosería, cada abucheo.
"Para ellos era muy importante quedar en primer lugar y jugar el cuarto partido aquí en Torreón, porque saben que estaremos ahí para apoyarlos".
DESDE ASIA PARA TORREÓN
Desde Uzbekistán llegaron banderas, playeras azules y blancas, y "doppis" (sombreritos) para la porra de Torreón.
"Les mandé un mail para pedirles todos los accesorios porque les expliqué que con todos mis amigos estaba organizando una porra para la selección de Uzbekistán. Tuvimos una buena respuesta y nos trajeron todo", dice Cristopher Pollet.
En el estadio, La POU entretiene a la afición, "pero todo es bien sano, un ambiente familiar, porque lo único que queremos es que Uzbekistán se sienta como en casa para que juegue bien al futbol".
La POU fue organizada por Agustín Lambarry, Enrique Menéndez y Cristopher Pollet, después se unió Cristopher Basso y con él llegaron decenas de seguidores.
"Les gritamos 'aquí están, aquí están los jugadores que llegaron de Uzbekistán', y modificamos algunas porras del Santos como 'amigos yo soy uzbeko y tengo aguante, yo sigo a mis uzbekos a todas partes... y así', tenemos varias".
Para La POU ha sido difícil soportar los partidos de las 3 de la tarde con más de 40 grados de temperatura, "es duro para el cuerpo y para la cartera. Nos toca como una hora de sol en la tribuna, los asientos están calientes y hay que refrescarnos con unas cervezas bien frías".
Para apoyar a los jugadores, La POU mandó hacer una bandera de siete por cinco metros pero en el estadio sólo permiten de 1.5 metros. Se tardaron tres días en hacerla, pero sólo pudieron lucirla en el primer partido de Uzbekistán porque en el segundo ya no los dejaron sacarla.
APOYO HASTA MONTERREY
Cristopher Basso, otro de los principales líderes de La POU, dice que si Uzbekistán gana hoy, se irán a apoyarlos hasta Monterrey el próximo sábado.
"La gente en el estadio se nos acerca. Nos apoyan y se quieren sentar con nosotros. Los niños nos piden nuestras banderas azules, que les pintemos las caritas y se toman fotos con la porra", comenta.
Cristopher dice que si bien los uzbekos perdieron el primer juego ante Nueva Zelanda, se repusieron y vencieron a Estados Unidos y República Checa, y todo gracias al apoyo de la afición lagunera.
"Creo que nuestro apoyo sí fue determinante para que salieran adelante, así lo han dicho ellos mismos. Se sienten como en casa y como afición estamos agradecidos por su buen juego, porque le echaron ganas y salieron adelante; estamos orgullosos del equipo".
Para la Copa del Mundo Sub-17 de México 2011, este país de Asia Central debutó en este tipo de competencia, "ése fue un factor determinante. Además, al igual que Torreón, Uzbekistán es productor de algodón y minerales, mucha gente no sabe que tenemos esas coincidencias con ese país".
Venir de un país tan lejano para jugar en un clima extremo como el de Torreón es algo que La POU también valoró para arroparlos.
"Ojalá la gente vaya al estadio porque es un equipo que sí merece nuestro apoyo", dice Cristopher.
20 JÓVENES
Laguneros integran la Porra Oficial de Uzbekistán en el Estadio Torreón.