Casi listo. El restaurador Jesús Siller dijo que el mural de Chávez Morado se encuentra a un 80 por ciento de la restauración.
A un 80 por ciento del total de su restauración, el Mural de José Chávez Morado que se encuentra custodiado por la enorme escultura del Cura Hidalgo, ubicada al final del bulevar Independencia, vuelve a lucir la intensidad de sus colores y la compleja técnica con la que fue elaborado.
El artista lagunero Jesús Siller, encargado de resucitar del abandono la obra de gran formato que plasma una interpretación del artista mexicano de la Independencia y la Revolución Mexicana, ha requerido más de 5 meses de minuciosos procesos de limpieza para retirar el salitre y el sarro acumulado por años en la obra.
"Ahorita lo único que falta es que nos llegue el azulejo de las reposiciones, solamente para limpiar el mural le aplique siete capas de sarrisidas y pulimentos, trabajo que se hace en partes muy pequeñas", comentó el artista y restaurador.
Chávez Morado fue uno de los primeros mexicanos que utilizó el mosaico italiano en la obra plástica monumental. Fue miembro del Partido Comunista Mexicano, vicepresidente para América Latina del Consejo Mundial de las Artesanías de la UNESCO, y miembro fundador del Salón de la Plástica Mexicana.
Siller recomienda que una vez terminada la obra el muro sobre el cual se encuentra empotrada, no sea pintado sino que se deje el "Hormigón puro", como originalmente se encontraba.
La plaza donde se encuentra la obra también espera una completa remozada que incluya, iluminación, la eliminación de la fuente de agua (causante principal del deterioro de la obra) y algunas medidas de protección para la escultura.
