El presidente de México, Felipe Calderón, afirmó en una entrevista que publica hoy el diario El Universal, que en las agencias de seguridad de EU. "sí hay descoordinación" y en las mexicanas no, en respuesta a unos cables diplomáticos estadounidenses filtrados en diciembre pasado por WikiLeaks.
El gobernante señaló que en esos cables "los embajadores (de EU.) o quienes generaron los cables le echaron mucha crema a sus tacos (exageraron). Siempre querían levantar sus propias agendas ante sus propios jefes, y han hecho mucho daño por las historias que cuentan y que, la verdad, distorsionan".
Una de las comunicaciones filtradas revela supuestamente que un ex alto funcionario mexicano dio a entender durante una reunión con representantes de la Fiscalía General de EU. en octubre de 2009 que el Gobierno había perdido el control sobre ciertas partes del país por el narcotráfico.
Otra, firmada por el actual embajador estadounidense en México, Carlos Pascual, revela la desconfianza de EE.UU. sobre la capacidad de la nación vecina para luchar eficazmente contra el tráfico de drogas debido a la rivalidad y descoordinación entre los cuerpos de seguridad, la "generalizada" corrupción oficial y la incapacidad del Ejército para reunir pruebas que incriminen a sus detenidos.
"Los (cables) que hablaban de la descoordinación entre las distintas dependencias. Yo al embajador estadounidense no tengo por qué decirle cuántas veces me reúno con el gabinete de seguridad ni qué digo; la verdad es que no es un asunto de su incumbencia", manifestó Calderón en declaraciones al diario mexicano.
"No acepto ni tolero ningún tipo de intervención", apuntó.
"La ignorancia del señor se traduce en una distorsión de lo que ocurre en México y se cae en una afectación y una molestia en nuestro propio equipo", indicó, en aparente alusión al embajador de EE.UU.
A juicio del mandatario, "donde sí hay descoordinación es entre agencias en materia de seguridad en Estados Unidos".
"Nosotros vemos que la DEA, la CIA y el ICE (la Agencia de Aduanas e Inmigración) siempre tienen una política de 'Borondongo le dio a Bernabé'. La verdad es que no se coordinan y rivalizan entre sí", dijo.
Para el presidente mexicano, la cooperación con EU. en la lucha contra el crimen organizado "termina por ser notoriamente insuficiente".
Las autoridades estadounidenses tienen que colaborar "en reducir el consumo de drogas" pero "no lo han reducido", y deben "detener el flujo de armas", lo que tampoco han hecho, y más bien "lo han incrementado", sostuvo.
De otra parte, el gobernante criticó la falta de corresponsabilidad de algunos de los 32 estados mexicanos en la lucha contra el crimen organizado, los cuales prefieren "tirarle la bolita (la responsabilidad) al presidente de la república" y no hacer el trabajo que les corresponde.
El funcionario, quien termina su Gobierno en diciembre de 2012, confesó que "quisiera ser recordado como un presidente que transformó a México, un presidente que pudo iniciar un punto de inflexión en muchas cosas, un presidente que logró la cobertura universal de salud... en fin, o un presidente comprometido con el medio ambiente, que es mi tema favorito".
Sin embargo, afirmó que "la política es miope y la historia es tremendamente injusta".