Sin leyes. De acuerdo a un análisis de la revista Economista, el Congreso de México es el más flojo debido a la escasa aprobación de leyes.
El Congreso de México es la legislatura más perezosa de América Latina, donde sus miembros ganan más y trabajan menos, de acuerdo con la revista The Economist.
La influyente revista británica titula un reportaje en esta semana "El Congreso de la Siesta. La Legislatura inútil de México", en el que señala que los 500 miembros de la Cámara de Diputados y los 128 senadores regresarán al trabajo hasta febrero.
De acuerdo con el reportaje, con 195 días de trabajo en sesiones, el Congreso mexicano tiene la menor cantidad de días laborales entre las legislaturas de América Latina. Y el sueldo calculado en 11,200 dólares al mes es el segundo más alto de la región, después de los legisladores brasileños.
Sin embargo, la revista señala que la poca efectividad del Congreso no sólo se mide por el sueldo y los días laborales, sino por los resultados. "Cuando se las arreglan para votar, con más frecuencia es para bloquear iniciativas de rivales", dice el texto.
El reportaje indica que los últimos seis años han sido de "parálisis" en la Cámara de Diputados, que ha frenado la agenda de reformas del presidente Felipe Calderón.
La reforma fiscal aprobada en 2007 fue "modesta", mientras que una ley contra monopolios fue "podada" y una reforma política ha sido "destripada" y no se aprueba.
"Incluso cuando hay consenso, el Congreso no está de acuerdo. Todos los partidos dicen querer una fusión de las policías locales que son inefectivas ante los cárteles de la droga. Pero a cinco años de la guerra contra el crimen, las leyes todavía no se aprueban", señala el reportaje.
La revista señala que la dificultad para formar coaliciones ha sido natural desde que el PRI perdió la mayoría en 1997, pero añade que el hecho de que un presidente no tenga la mayoría legislativa no ha sido obstáculo para avanzar reformas en otros países. Según el análisis, el Senado ha sido más activo para aprobar reformas, mientras que en la Cámara de Diputados, los legisladores del PRI (la bancada más grande) "tienen deuda política con su candidato presidencial, Enrique Peña Nieto, que no quiere dar al PAN ninguna victoria antes de las elecciones de julio"