“El Lazca”, no presentó tiro de gracia y estaba sano al momento de su muerte, sólo tenía algo de sobrepeso, por lo que no tenía ninguna enfermedad terminal.
El cuerpo de Heriberto Lazcano Lazcano “El Lazca”, no presentó tiro de gracia y estaba sano al momento de su muerte, sólo tenía algo de sobrepeso, por lo que no tenía ninguna enfermedad terminal, informó Felipe de Jesús Cobos Avilés, Director General de Servicios Periciales de la PGJE de Coahuila.
De acuerdo a lo que explicó, una persona que tiene una enfermedad terminal tiene características físicas aparentes como pérdida de peso marcada y demacración; sin embargo, al realizar la autopsia de ley no se determinó que los órganos estuvieran afectados.
“No tenía pérdida de peso, su estado de salud era normal y los órganos presentaban características normales, además no tenia tatuajes en el cuerpo”, dijo.
Jesús Cobos Avilés informó que se le hicieron pruebas y estudios toxicológicos al cuerpo que le fueron entregadas al Ministerio Público de la Procuraduría General de la República al haber atraído la investigación.