Cansancio, fatiga física, anorexia, fiebre, pérdida de peso, dolores articulares y musculares, así como malestar general, son algunos síntomas del Lupus.
Cansancio, fatiga física, anorexia, fiebre, pérdida de peso, dolores articulares y musculares, así como malestar general, son algunos síntomas del Lupus, enfermedad autoinmune cuya causa exacta actualmente se desconoce.
En el marco del Día Mundial del Lupus, Juan de Jesús Jakez Ocampo, investigador titular del Departamento de Inmunología y Reumatología del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán”, especificó que se trata de un padecimiento en el que el sistema inmune forma anticuerpos que pueden dañar cualquier órgano.
Este sistema, detalló en entrevista, está diseñado para combatir substancias ajenas o extrañas al cuerpo, y en las personas con Lupus ataca a las células y tejidos sanos.
El nombre de esta enfermedad no proviene directamente del latín, sino de un estilo francés de máscara (loup>lobo de carnaval) que las mujeres usaban alrededor de los ojos, inicialmente el Lupus puede afectar órgano, sistema o tener carácter multisistémico.
El Lupus puede dañar cualquier parte del organismo, aunque los sitios más frecuentes son el aparato reproductor, las articulaciones, la piel, el cerebro, corazón, los pulmones, los vasos sanguíneos, los riñones, el hígado y el sistema nervioso.
Actualmente no hay consenso en si es una sola circunstancia o un grupo de enfermedades relacionadas, pero al tratarse de una enfermedad autoinmune hay distintos factores que pueden influir en el sistema inmunitario y provocar Lupus.
Existen varias hipótesis de su origen, como la genética, la ambiental, la fotosensibilidad a los rayos ultravioleta, y la hormonal (en específico los estrógenos femeninos). Hay varios tipos de este padecimiento: Lupus Eritematoso Sistémico (LES), Eritematoso Discoide, Cutáneo Subagudo, Secundario y Neonatal.
Jakez Ocampo subrayó que el curso del Lupus es impredecible, con periodos de crisis alternados con remisión, es una enfermedad crónica e inflamatoria, y la gravedad varía entre leve e intermitente o persistente y fulminante.
Sin embargo, destacó, pese a que es una enfermedad crónica que no tiene cura y los daños que provoca, es altamente tratable con algunos medicamentos, como los corticoides y los inmunosupresores, y los pacientes pueden llevar una vida normal si el diagnóstico es oportuno y llevan un adecuado tratamiento.
Recordó que en México se estima que hay 20 casos de Lupus por cada 100 mil habitantes, de los cuales 90 por ciento son mujeres entre 20 y 45 años de edad.
Pero, enfatizó, las pacientes pueden tener bebés sanos, aunque es importante la planificación antes del embarazo y la asesoría durante éste, para involucrar al equipo de atención médica durante la gestación.
Finalmente, el especialista recomendó a los pacientes con Lupus permanecer en estrecho contacto con su especialista.
