Paola se colgó su segunda medalla en Juegos Olímpicos. (EFE)
La única mujer en conseguir medallas olímpicas en versiones diferentes. Ese podría ser el apelativo que acompañe a la clavadista Paola Espinosa para los próximos años si es que la taekwondoín María del Rosario Espinoza no la secunda en su participación en los presentes Juegos Olímpicos.
Pero el hecho de ya tener dos medallas en su palmarés es algo que la llena de mucho orgullo. Una plata, a lado de Alejandra Orozco, conseguida este martes, que se suma a al bronce de hace cuatro años en la misma prueba de sincronizados plataforma femenil, pero en aquella ocasión alcanzada a lado de Tatiana Ortiz.
“Para mí significa mucho el lograr medallas en justas diferentes. Imagínate lo que es hacer historia en tu propio país, que te vio nacer, crecer, esforzarte, luchar, y que también te vio llorar y reír. Para mí este momento va a quedar para toda mi vida porque muy pocos tenemos la oportunidad de escribir nuestra propia historia”, comparte Paola.
La clavadista, alumna de la china Ma Jin, sabe que estas podrían ser sus últimas pruebas desde la plataforma. Tiene conciencia que a su edad no podrá seguir tirándose desde los 10 metros y es por eso que se encuentra disputando la justa con algo de nostalgia. Una historia que, señala, es diferente a lo que vivió en Beijing 2008.
“Las dos medallas tienen su momento y su propia historia. Creo que se te van olvidando las historias pero puedo decir que esta la estoy viviendo muy bien, y más porque está fue en el día de mi cumpleaños. Me di mi propio regalo y por eso es la gran diferencia. Muy pocas tienen este privilegio”, agrega.
Sobre su compañera, se entrega en halagos pues destaca que a sus 15 año, se trata de una clavadista con gran nivel. Confiesa que durante toda la prueba la estuvo alentando y llevando en cada clavado.
“Ale es una gran niña. Siempre le he dicho que tiene mucho talento. Simplemente estoy abriendo las puertas para la gente que viene atrás. Es la evolución del ser humano. Cada vez vienen mucho más preparados y en unos años habrá nuevas caras que estarán dando la cara por México y eso me tiene muy orgullosa”, destaca
Para Orozco se trata de una gran experiencia el poder debutar en unos Juegos Olímpicos. Es aún una atleta juvenil pero logró acoplarse a la experiencia de Paola. Alejandra reveló que tuvo que postergar su fiesta de cumpleaños 15 para poder concentrarse en la prueba “Ahora veo que fue una gran idea y aquí tengo un mejor regalo”, dijo.
“Paola siempre fue mi ídolo. Le tengo mucha admiración y así la veía en la tele en Beijing2008. La verdad es que aún no me cae el 20 que soy su compañera en unos Juegosl Olímpicos y mucho menos que hayamos ganado una medalla. Todo parece un sueño”, compartió la alumna de Iván Bautista.
