José Raúl Mulino, ministro de Seguridad panameño, adjudica su renuncia a las posturas del jefe de la Policía Nacional. ARCHIVO
El ministro de Seguridad de Panamá, José Raúl Mulino, presentó hoy su renuncia al cargo debido a lo que calificó de “ilegal” actuación del jefe de la Policía Nacional, Gustavo Pérez, por cuestionar un nuevo sistema disciplinario.
La posición de Pérez “es para mí sencillamente inaceptable”, indicó Mulino en la misiva enviada al presidente panameño Ricardo Martinelli para comunicarle su renuncia efectiva a partir del próximo 15 de marzo.
Calificó de “falaz”, “ilegal” y “anticonstitucional” el planteamiento de Pérez de oponerse a un nuevo régimen disciplinario para los estamentos de seguridad aprobado en febrero anterior por el Consejo de Gabinete.
“A pesar del afecto al amigo y presidente, aceptarlo no solo avalaría lo antes dicho sino permitiría con ese acto, dejar pasar un abierto acto de desconocimiento e irrespeto del señor Pérez a la institucionalidad democrática”, aseveró Mulino.
Comentó que ese accionar “podría trastocar, si se le continúa permitiendo, principios democráticos vitales o que iniciemos una jornada de errores que ya costaron mucho a nuestro país décadas atrás”.
“Se trata de dejar con mi renuncia sentada mi gran preocupación y protesta por haberse desautorizado de manera pública a su superior inmediato y a todo el Consejo de Gabinete con fundamentos alejados de la verdad lógica y material”, advirtió Mulino.
Pérez dijo el jueves, al referirse al intento del nuevo régimen disciplinario mediante la creación de una oficina única, que sólo un policía puede investigar a un policía y más tarde el presidente Martinelli anunció que el proyecto sería retirado.
Opositores calificaron de insubordinación la actitud de Pérez y recomendaron la renuncia de Mulino, quien acompañaba a Martinelli en el gabinete desde el 1 de julio de 2009, aunque inició como ministro de Gobierno.
En un comunicado el presidencial Palacio de Las Garzas dijo este viernes que el proyecto será reconsiderado en el gabinete “ya que ese es el procedimiento legal que debe seguirse luego de que surgieran algunas opiniones que considera deben valorarse”.
“Las objeciones (de los estamentos de seguridad) son válidas”, acotó el mandatario al calificar de “excelente” el trabajo de Pérez.
La Asamblea Ciudadana –integrada por diversas organizaciones defensoras de la institucionalidad- calificó de violación a la Constitución la actuación de Pérez porque la carta política prohíbe a los jefes policiales ser deliberantes.
“El director de la Policía se ha sublevado contra el orden constitucional al repudiar una resolución de gabinete, sin tener base legal alguna para ello y al afirmar que la policía juzga a la policía, en abierto desafío al orden legal”, comentó la Asamblea Ciudadana.
Exigió la destitución del jefe de la Policía “por violar la Ley y atentar contra la personalidad interna del Estado” e iniciar la desmilitarización de la entidad, uno de los componentes de los estamentos de seguridad.
El opositor Partido Revolucionario Democrático (PRD) calificó de negativa la señal del mandatario de hacerle caso a Pérez al anunciar que se reconsiderará el proyecto sobre el régimen disciplinario para los estamentos de seguridad.