La Cámara de Diputados aprobó ayer prohibir la extracción de carbón de los llamados "pocitos", donde al menos 70 trabajadores han muerto en Coahuila en los últimos seis años.
Los diputados avalaron una reforma a la Ley Federal del Trabajo para impedir la explotación de carbón en minas de tiro vertical de menos de 100 metros de profundidad, para permitir sólo la extracción en tajos abiertos o en tiros inclinados, que son formas más seguras.
Los "pocitos" han proliferado en la región Carbonífera de Coahuila. Son el método de extracción más peligroso en la industria del carbón, pero no cuentan con supervisión permanente por parte de las autoridades.
En muchos casos las minas ni siquiera tienen permisos y algunos "pocitos" han sido vinculados al crimen organizado.
La reforma aún debe ser aprobada por el Senado.
De concretarse esta reforma, la Ley del Trabajo establecería de seis a nueve años de cárcel y multas de hasta 10 mil salarios mínimos a los operadores de "pocitos" no autorizados cuando mueran trabajadores durante la extracción de carbón.
La reforma también amplía las penas a los encargados de minas autorizadas donde se produzca la muerte de trabajadores por omisiones en la seguridad. En este caso la sanción sería de tres a seis años de cárcel y multa de hasta 5 mil salarios mínimos a los operadores.
El gobernador Rubén Moreira consideró positivo el avance de la reforma, al prohibir una de las actividades más peligrosas en la minería de carbón.