La Fiscalía General de Jalisco informó que el Juez Mixto de Primera Instancia con sede en Zacoalco de Torres dictó auto de formal prisión al ex alcalde de Villa Corona, José de Jesús Ortiz Uribe, y a su hijo Leonardo Ortiz Hernández, por su presunta responsabilidad en el delito de secuestro agravado.
El ex presidente municipal y su hijo fueron detenidos por elementos de la Fiscalía General y puestos a disposición del juez, quien les iniciará el proceso penal para responder por los hechos en los que murieron Carlos Francisco Miranda Zárate y Gustavo Adolfo Calderón Hernández, de 25 y 30 años, cuyos cadáveres fueron exhumados el 22 de mayo de 2012.
En el caso del ex alcalde se estableció que él ordenó a policías del municipio que dejaran la comandancia donde tenían detenidos a dos jóvenes e iban a pasar por ellos pero un grupo armado arribó a las instalaciones policiales y se los llevó, posteriormente fueron localizados sin vida, refirió.
Precisó que el hijo del ex edil, de acuerdo con declaraciones de los arraigados, presuntamente se mantuvo al pendiente de que las indicaciones que dio su padre fueran cumplidas, estuvo presente en la comandancia para preguntar por los detenidos y presenció el momento cuando el grupo armado se llevó a los fallecidos.
Por las investigaciones realizadas los cadáveres fueron localizados enterrados en el predio ‘La Tabla’, junto al camino a La Cofradía, a 500 metros de la carretera a Barra de Navidad, en el municipio de Cocula, en una fosa clandestina y cada uno presentaba una herida de bala en la región temporal izquierda.
Añadió que el hallazgo se efectuó al investigar a Carlos Fuentes Bravo, ex policía municipal de Tala, y se sabe que las dos víctimas habrían sido asesinadas el 22 de febrero de 2012.
Subrayó que se estableció que las dos víctimas inicialmente fueron privadas de la libertad por un grupo de la delincuencia organizada y estaban cautivos en una casa en Villa Corona, de donde escaparon cuando Carlos Fuentes Bravo se encargaba de custodiarlos.
Destacó que los dos hombres llegaron a una finca donde pidieron auxilio y se presentaron elementos de la Policía Municipal de Villa Corona y los llevaron a las instalaciones de su corporación, luego los entregaron a integrantes de la organización delictiva, quienes los asesinaron en el lugar donde el pasado día 22 fueron exhumados.
