Al menos ocho policías murieron ayer y otras diez personas resultaron heridas en un ataque suicida con coche bomba en la ciudad petrolera de Kirkuk, unos 250 kilómetros al norte de Bagdad, informó una fuente de seguridad local.
El terrorista lanzó el ataque contra un puesto de control mixto, integrado por policías iraquíes y agentes de seguridad kurdos, en la zona de Al Dabs, a unos 40 kilómetros al noroeste de Kirkuk, precisó la fuente. La Policía cercó la zona del atentado en previsión de otros ataques similares.