Las células madre mesenquimales, recientemente se han convertido en una posibilidad eficaz para el tratamiento para diversas enfermedades, entre las que se encuentra la enfermedad degenerativa de las articulaciones. Sin embargo, la desinformación y la ignorancia son fuentes potenciales de rechazo y fracaso para esta modalidad de tratamiento.
Es importante que los pacientes a quienes se les propone este tipo de tratamiento conozcan las ventajas, desventajas, riesgos y beneficios que implica. Por lo anterior, esta nueva modalidad de tratamiento debe ser llevada a cabo por un grupo de expertos en biología molecular, biología celular, hematología, inmunología y enfermedad articular degenerativa. Además, deberán contar con las instalaciones adecuadas para su procesamiento. Algunos de los principales beneficios son la mejoría del dolor y la capacidad funcional articular, así como la posibilidad de evitar la necesidad de tratamientos quirúrgicos, tales como la colocación de prótesis. Es importante hacer notar que esta forma de tratamiento puede regenerar los tejidos dañados y modificar la evolución de la enfermedad. Los problemas que pueden ser tratados con esta forma de terapia son: Fracturas que no han curado, desgaste de cartílago articular, desgarres de tendones y ligamentos, bursitis y lesiones musculares a nivel de rodilla, hombro, pie, tobillo, cadera y columna.
Posterior al trasplante de células madre mesenquimales, el tiempo de retorno a las actividades es variable, y depende de la severidad de su enfermedad e incluso se puede requerir terapia de rehabilitación. Durante las visitas al especialista, éste determinará cuando el paciente será capaz de retomar actividades físicas regulares y el pronóstico de su enfermedad articular.
Las células madre mesenquimales pueden ser obtenidas de diferentes fuentes, siendo las más frecuentemente utilizadas la médula ósea, el tejido adiposo y el cordón umbilical; sin embargo, la cantidad de células que se obtiene de estos tejidos no es suficiente para aplicarlas, por lo que es necesario cultivarlas para su expansión y posterior uso terapéutico. También estas células tienen características que deben tomarse en cuenta al momento en que se contempla la aplicación; éstas tienen que ver con su forma, su capacidad adherente, algunos componentes de su superficie y la posibilidad de modular la actividad del sistema inmune. En osteoartritis la forma de aplicación es a través de una infiltración.
Nuestra Facultad de Medicina de Torreón es pionera en el país en el cultivo y aplicación de terapias con células madre mesenquimales, gracias a la vinculación que se ha establecido con centros internacionales líderes en esta tecnología. Finalmente, el ser o no candidato a recibir terapia celular debe ser determinado por un grupo médico multidisciplinario especializados en terapia celular.
*Traumatólogo. Profesor de Traumatología e Investigador de la Facultad de Medicina de Torreón UA de C.
La próxima colaboración será del Dr. Mario del Valle, neurocirujano.
Www.facultaddemedicinatorreon.blogspot.com