El padre no soportó el llanto de su hijo, el cual no le permitía jugar a gusto Xbox. (Especial)
Algunas fanáticos de las consolas hacen casi cualquier cosa con tal de no separarse de su apreciado videojuego, a tal grado de llegar a cometer locuras de las cuales se arrepienten después.
Así fue como un joven padre de 24 años de Florida, cuando al intentar terminar una partida en un videojuego se vio interrumpido por el llanto de su pequeño hijo de a penas un año de nacido.
El llanto molesto tanto a Cody Wygnat (el padre) que optó por asfixiarlo, tapándole la boca y la nariz por un periodo de tres minutos, tal como reportó el mismo progenitor a la policía.
Cuando el menor se calló por completo, Cody comentó a los policías que su hijo quedó debilitado, optando por llevarlo a la cuna. Al acostarlo, el hombre tapó por completo al niño con varias cobijas, impidiendo que éste recobrara el aliento.
Después de jugar por cerca de una hora y media, Wygnat regresó a checar al infante, llevándose la terrible impresión de verlo muerto.
Cody llamó a los cuerpo de rescate pero ya era demasiado tarde. Una vez que las autoridades se enteraron del caso lo arrestaron.
Durante el interrogatorio, el padre del chico aceptó haber sufrido un ataque de frustración al no poder callar a su hijo, impidiendo que terminara tranquilamente una partida de Xbox.
Cody Wygnat asfixió a su hijo para que le permitiera jugar Xbox.