Maquina del Central Mexicano en Querétaro.
TERCERA PARTE
La construcción de la estación Torreón del Ferrocarril Central Mexicano comenzó casi a la par de la del Ferrocarril Internacional Mexicano que en un mismo edificio alojó al hotel llamado de los chinos; los primeros viajeros con rumbo o procedentes de la ciudad Porfirio Díaz y que al llegar a este nuevo lugar de transbordo relataban la incomodidad de tener que esperar sin un local o espacio adecuado, ya que ambas estaciones se encontraban en construcción.
Para estas mismas fechas la Revolución Industrial en los Estados Unidos había llegado a una madurez siendo los inicios del vapor y de la transformación del hierro que comenzó casi 80 años atrás y que habían logrado una perfección en todas las ramas conocidas como los primeros motores movidos por vapor que habían superado en tamaño y capacidad de fuerza a sus predecesores. La medida que regía en esta época fue el caballo de potencia. La madurez y poderío de las compañías norte americanas fue creciendo a la par de la expansión ferroviaria a lo largo y ancho de la Unión America y su inminente llegada a nuestra frontera hizo ceder al gobierno del General Porfirio Díaz en una nueva invasión pero ésta de carácter comercial y tecnológica.
La transformación de nuestro país comenzó con el inicio de la construcción del Central Mexicano y cada tramo terminado en su avance, el ferrocarril comenzó a transitar y tantpo el comercio como la industria de cada región por la que pasó, comenzó a dirigirse hacia estas vías. México al ser un país pobre y escaso de tecnología prácticamente solo exportaba materias primas o elementos sin ningún valor agregado, en cambio los norte americanos comenzaron a exportar maquinarias para todo tipo de industria.
La llegada de los ferrocarriles a la Comarca Lagunera no pudo haber sido en mejor momento siendo espectacular el desarrollo de la minería, la industria, el comercio y la agricultura y con la unión de vías se le logró dar a este punto la capacidad de ser el polo económico más importante del país y desde este lugar se conectaba la capital de la Repùblica con ciudades como Nueva York y Chicago por el Ferrocarril Central Mexicano y por el Ferrocarril Internacional a la ruta Sunset que corre entre Nuevo Orleans y Los Ángeles. La mecanización en todos los procesos desarrollándose en el área de las estaciones la materia prima que se elaboraba en la Comarca comenzó a tener un valor agregado como lo fue el algodón con la creación de fábricas de hilados y textiles y el aprovechamiento de sus derivados para la producción de jabón. La estación de la Villa de Lerdo rápidamente se comenzó a construir en sus alrededores y el mismo caso fue el de las estaciones del Torreón. La Constancia fue la primera fábrica de hilados y tejidos inatalándose el 1o de Agosto de 1890 con 100 telares y en 1898 se estableció la fábrica de aceites y jabones llamada Compañía Manufacturera La Alianza. En 1900 se estableció la jabonera La Unión y para 1901 la fábrica de Hilados y Tejidos La Fé con 250 enormes telares siendo todas estas en la población del Torreón y en Gómez Palacio se instaló la fábrica de Hilados y Textiles la Amistad y la fábrica de jabón La Esperanza en 1892. Esta última planta fue comprada en su totalidad en la ciudad de Forth Worth, Texas y había estado trabajando por dos años sin gran éxito en esa población y fue traída completamente a la Laguna.
Años previos a la llegada del primer ferrocarril, la agricultura hortícola presentaba una producción poco relevante, con la dificultad para transportar productos perecederos como el tomate que era prácticamente imposible. El tiempo del traslado y lo deteriorado de los caminos hacía que en esta área fuera solo para consumo local, la producción del algodón era relativamente poca y limitada a lo rudimentario de la forma de riego y las distancias de traslado minaban su precio, pero no fue impedimento para su comercialización. La llegada del ferrocarril trajo la mecanización y el uso de herramientas especializadas fabricadas en metal con mayor duración y las presas se construyeron con mejores elementos y aditamentos metálicos para su mejor función con la construcción de canales que aumentó al traer mejor equipo y el establecimiento de fábricas hizo que la demanda del algodón creciera y por ende la superficie cultivada tambien, dando así ese valor adicional de un producto transformado.
Para el año de 1895 en el primer censo realizado se tuvo una población total de 11,372 personas y de estos solo 3,969 habitaban la zona urbana de Torreón, las demás personas vivian en 24 haciendas y ranchos de la municipalidad.
La producción y explotación de la minería durante muchos años fue limitada debido a las herramientas rudimentarias y solo las minas que tenían una planta beneficiadora cercana podían crecer y darle un mayor valor a su mineral como lo fue el caso de la mina de Ojuela y su planta de beneficio en la hacienda del Agua en Mapimí. Con el ferrocarril llegó equipo especializado y la profundidad de exploración y explotación fue mayor teniendo malacates eléctricos, mejor iluminación, bombas de agua y equipo para suministrar aire fueron algunos de los equipos que mejoraron la extracción y gracias a la fuerza del vapor que logró dar movimiento a estos equipos y en su caso la generación de luz.
Las plantas beneficiadoras comenzaron a mejorar en sus procesos al crecer por el aumento de la extracción de los minerales y en lo técnico gracias a la llegada de gente especializada en cada paso desde la extracción en mina hasta su beneficio final en planta.
La conexión ferroviaria hizo que la Villa del Torreón se convirtiera en un centro minero especializado a partir de 1901 que fue cuando se instaló La Compañía Metalúrgica de Torreón de la familia Madero y muchas partes del país pudieron enviar por las vías una gran cantidad de minerales para ser procesados.
La ganadería comenzó en la Laguna en una forma extensiva con el paso de los primeros ferrocarriles y debido a las grandes distancias que el ferrocarril recorría, el ganado no resistía estos trayectos provocando la construcción de corrales para descanso y alimentación en los patios de las estaciones y rápidamente se hizo extensiva la siembra de pasturas. En 1901 se instaló en la zona industrial de Torreón la compañía llamada La Internacional; compañía exportadora de carnes, peces y mariscos, llegando a ser en 1907 una de las principales empresas de este giro en el país. El aumento del ganado continuó y para 1902 se dio la noticia de la compra de un gran número de ganado en Chihuahua para ser alimentado en los terrenos de la compañía Jabonera de la Laguna, esta compañía fue de las principales productoras de harinolina que era un sub producto de la semilla del algodón y utilizado como alimento de ganado.
La zona desértica que sumada al eje ferroviario de la Laguna y junto al poder económico generado por la llegada de grandes capitales e inversionistas extranjeros, permitió que una planta del guayule integrarse a un nuevo mercado mundial; este arbusto abundante en el semi desierto de la Comarca Lagunera, Zacatecas y Chihuahua al ser procesado se le extrae un compuesto llamado latex, con una producción más sencilla y menos costosa que el algodón y que de hecho llegó a ser rival agrícola de esta planta, por su poca necesidad de riego o escasa lluvia y muy poca demanda de mano de obra aunado con un precio más estable, además de ser un compuesto importante para la fabricación de llantas de los primeros automóviles así como parte fundamental como materia prima que revolucionó al mundo. Con este mismo latex se pudieron forrar por primera vez todo tipo de cables dándoles la capacidad de aislamiento y mayor duración e igualmente se convirtió en el iniciador por su consistencia y flexibilidad, en las primeras suelas plásticas para zapatos e igualmente permitió hacer las primeras jeringas plásticas para uso médico y un sin fin de usos más en lo que fue el inicio del aprovechamiento del plástico natural.
Para 1902 en la Comarca Lagunera, se comenzaron a instalar las primeras plantas procesadoras siendo un total de diez y seis. En la Flor de Jimulco, Amador Cárdenas fundó la primera llamada Compañía Anglo Mexicano y con el uso del ferrocarril pudo transportar el latex extraído como producto terminado. Otras dos de las más importantes empresas fueron la Compañía Guayulera de Torreón y la Continental Mexican Rubber Company, siendo su edificación posible por el apoyo del ferrocarril para traer las maquinas, calderas y demás elementos requeridos para su instalación, así como tener la facilidad de tráfico ofrecido por las vías del ferrocarril para llevar sus productos terminados a Estados Unidos y el resto del país teniendo inversiones millonarias de dólares que fueron hechas por Rockefeller en este sector del platico aquí en nuestra región.
La gran distancia entre la Ciudad de México y Paso del Norte propició que en el movimiento de ganado se construyera en la estación Lerdo y posteriormente en las de Torreón hubiera un área de corrales que rápidamente fue creciendo, demandando más alimento e incentivándose así la siembra de pastura y aprovechando los restos de la semilla de algodón. En 1901 se instaló en la zona industrial de Torreón la compañía llamada La Internacional, compañía exportadora de carnes, peces y mariscos, llegando a ser en 1907 una de las principales empresas de este giro en el país. El aumento en el ganado continuó y para 1902 se dió la noticia de la compra de un gran número de ganado en Chihuahua para ser alimentado en los terrenos de la compañía Jabonera de la Laguna y como ya se dijo, esta compañía fue de las principales productoras de harinolina que era un sub producto de la semilla del algodón y utilizado como alimento de ganado.
El auge y esplendor en nuestra Comarca Lagunera comenzó con la llegada de las vías en 1883 del Ferrocarril Central Mexicano, provocando una forma usual por años en el establecimiento de una población o comunidad y cambió cuando lo común era el hacerlo en los lugares cercano donde hubiera un abasto de agua ya fuera en pozos o bien a las orillas de un río. En el trayecto de 1970 kilómetros y cada 20 kilómetros el ferrocarril construyó una estación para asegurar el abasto de agua y carbón y muchas pequeñas estaciones solo cumplieron este objetivo siendo solo dos las que lograron un gran desarrollo; la estación Lerdo que al poco tiempo provocó el nacimiento de la ciudad de Gómez Palacio y en el caso del punto de unión con el Ferrocarril Internacional nació la ciudad de Torreón. Ambas poblaciones con la influencia directa del Gobierno del General Díaz y la Revolución industrial nacieron y contagiaron a las poblaciones aledañas y no hay forma de explicar el origen de ambas sin contar lo que la fuerza del vapor representó y en el caso de Torreón el 15 de septiembre de 1907 esta Villa recibió por sus méritos el nombramiento de ciudad y en este mismo año se ubicó como la tercer ciudad más importante del país.
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