Objetivo. Invitan a celebrar las posadas en un ambiente de respeto y fraternidad, con la alegría del nacimiento de Jesús. (ARCHIVO)
Más que regalos, bebidas y relajo, las Posadas tienen como único fin, preparar espiritualmente a los fieles para la llegada de la Navidad, es decir, para el Nacimiento de Jesucristo. Inician formalmente el día 16 y concluyen el 24 de diciembre.
Su origen se remonta a los tiempos de la Conquista. Ignacio Mendoza Wong, vocero de la Diócesis de Torreón, explica que fueron los franciscanos, quienes idearon esta celebración para evangelizar a los aztecas. "Las posadas corresponden tradicionalmente al novenario que antecede a la fiesta de la Navidad", dice.
Los sacerdotes, cuenta Mendoza, armaron una serie de elementos entre ellos: el rezo del Rosario, la petición de posada, en donde se recuerdan los momentos tradicionales del camino de María y José emprendieron de Nazaret hacia Belén para prepararse para el momento en que María diera a luz.
"Y con la riqueza, y la creatividad de los frailes, a esos versos que recordaban la petición de esa posada, se le puso música y es lo que tradicionalmente cantamos hoy divididos en dos coros", comenta el sacerdote.
Al final, presentes debían de romper la piñata en forma de estrella con siete picos, que simbolizaban los pecados capitales. "El creyente con los ojos vendados movido por la fe, trataba de acabar guiado, solamente por el ánimo y el entusiasmo de los demás de la iglesia, que le gritaba hacia dónde debería de dirigir su golpe para acabar con los pecados. Y al golpear y romper la piñata viene todo ese derroche de regalos, de gracias, representados en los dulces, las colaciones que la piñata guarda".
A todo ese ritual se le conoce como las Posadas, lo de ahora, según el padre Ignacio Mendoza son fiestas genéricas. "Es cualquier fiesta que con motivo de los días de Navidad se realiza en torno a la convivencia, el baile, a la cena, la bebida y eso es lo que tradicionalmente se le llama posada. Pero en el fondo la posada es realmente ese sentimiento gozoso festivo", recuerda.
Previo al inicio de estos festejos, el vocero de la Diócesis de Torreón, pide a todos los fieles no perder el verdadero fin de las Posadas.
"No perder de vista cuál es el origen de la fiesta, la fiesta es recordar, vivir la celebración, el nacimiento de Nuestro Señor Jesucristo, ese es el motivo de la fiesta, no vaya a ser que festejemos el cumpleaños y el festejado no esté, porque no hay nada que haga referencia a este acontecimiento".