Ahora el transporte subterráneo es sumamente moderno. (ARCHIVO)
Ahora es común en zonas metropolitanas que concentran gran movilidad de tráfico urbano y sus beneficios se han hecho notar a lo largo del tiempo.
Es el transporte subterráneo, que tuvo como mente creadora al inglés Charles Pearson.
Pearson, en el año 1843, propuso abrir túneles subterráneos con vías férreas como parte de un plan de mejora para la ciudad de Londres; su propuesta fue aceptada por el Parlamento diez años después y en 1860 se comenzó su construcción, según señala el portal Quo.
La primera línea de metro con locomotoras de vapor empezó a operar el 10 de enero de 1863, para algunos años después ser reemplazadas por aquellas que utilizaban carbón.
Durante 1866, menciona la fuente citada, la ciudad de "Londres y la compañía Southwark Subway iniciaron la construcción de túneles de gran profundidad, sistema desarrollado por el inglés J.H. Greathead para evitar los cimientos de los edificios. El sistema eléctrico comenzó a operar en 1890".
EXTENSIÓN A OTRAS CIUDADES
Tan sólo durante su primer año, este servicio en Londres transportó a casi 10 millones de pasajeros, lo que generó que su popularidad se extendiera a otras ciudades como Budapest en 1896, Boston en 1897 y París en 1900.