La PF registró el mayor número de detenciones en entidades como Baja California, Tamaulipas y Michoacán. (ARCHIVO)
En los últimos años el crimen organizado ha implementado nuevas formas para operar, que incluyen el uso de uniformes originales o apócrifos de las fuerzas de seguridad.
De diciembre de 2006 a diciembre de 2015, fueron detenidas 2 mil 982 personas en posesión de prendas tácticas presumiblemente de alguna institución policial o castrense o por usurpar funciones públicas con el uso de condecoraciones, uniformes, grados jerárquicos, divisas, insignias y siglas de autoridades, según documentos de la Procuraduría General de la República (PGR) y de la Policía Federal (PF).
Mientras que la PF registró el mayor número de detenciones en entidades como Baja California, Tamaulipas y Michoacán, la PGR reportó la suma más grande de arrestos en la Ciudad de México, Tamaulipas y Chiapas.
El surtido de prendas viene de talleres donde se confeccionan de manera ilícita y de tiendas en las que se venden los originales de forma legal. Tan sólo en mayo de 2012, en Piedras Negras, Coahuila, se aseguró un taller clandestino, donde se hallaron alrededor de 500 camisolas y pantalones de camuflaje, así como chalecos antibalas clonados.
Simón Vargas comenta que aunque el crimen organizado es el que secuestra o comete un delito, al estar "disfrazados", las personas se lo atribuyen al Ejército o la Policía Federal.