Velázquez representa la diosa Venus de una manera erótica, ya que esta se encuentra tumbada sobre una cama y observa un espejo sostenido por su hijo Cupido, el dios del amor sensual. (ESPECIAL)
Realizada por el pintor español de Sevilla, Diego Velázquez, entre los años 1647 y 1651 (se desconoce con precisión la fecha de su realización) y considerado como uno de los cuadros que mejor representan ese amor del artista por las mujeres, según sus biógrafos, La Venus del espejo es la obra de arte de la semana elegida para dar gusto visual a todos los amantes del arte y como un homenaje a Velázquez, maestro de la pintura universal, por un aniversario más de su natalicio que se cumple este 6 de junio.
El cuadro fue elaborado por el artista utilizando la técnica de óleo sobre lienzo, tiene medidas de 122 por 177 centímetros y se ubica dentro de la corriente del barroco.
En la obra, Velázquez representa la diosa Venus de una manera erótica, ya que esta se encuentra tumbada sobre una cama y observa un espejo sostenido por su hijo Cupido, el dios del amor sensual.
La característica más notable del cuadro, señalan expertos, es el trato que Diego da a Venus, pues no la representa con las características de una deidad, sino en condiciones mundanas, es decir simplemente como a una mujer.
El cuadro se encuentra actualmente expuesto en la National Gallery de Londres, donde también es conocido como The Rokeby Venus. Este sobrenombre se debe a que durante todo el siglo XIX la obra se encontraba en el Rokeby Hall de Yorkshire.
En marzo de 1914, la venus fue víctima del vandalismo de un manifestante que con un hacha de carnicero le hizo siete cortes en la pintura, pero todos pudieron ser reparados y la obra fue restaurada en su totalidad.