Gran legado. El actor nacido en Lerdo, residía en la Casa del Actor; aún se desconocen las causas de su fallecimiento. (ARCHIVO)
El actor lagunero Carlos Cardán, quien sobresalió como villano en infinidad de telenovelas, falleció ayer a los 83 años por causas desconocidas.
Murió a las 6:30 horas del domingo, confirmó personal de la Casa del Actor, donde residía. Ahí se dedicaba a pintar y exponer sus cuadros.
Su cuerpo es velado en la sala 40 de una funeraria de la calle de Sullivan en esta ciudad. Al mediodía de hoy lunes se oficiará una misa en su honor para luego trasladar sus restos a cremación.
Carlos López Figueroa fue su nombre real. Nació el 3 de noviembre de 1932 en Ciudad Lerdo, Durango.
Hace 50 años inició su carrera como actor y en ese tiempo participó en más de 150 producciones de cine, televisión y videohome. Su primer trabajo fue en 1966 a través de la película El escapulario y en televisión mediante La Constitución (1970).
Son inolvidables sus trabajos en melodramas como Muchachitas, Yo compro esa mujer, Fuego en la sangre, Lo blanco y lo negro, Al norte del corazón y La Chacala. Su más reciente trabajo fue en uno de los episodios de la serie Mujeres asesinas.
En teatro destacó como parte de las obras: Paráfrasis de Otelo, El canto del cisne, Tío Vania y Vamos a contar mentiras.
Hace poco externó el deseo de volver a trabajar y deseaba llamarle al productor Juan Osorio. En su perfil de la página de Facebook se ve a Carlos Cardán recostado en una cama y con un cigarrillo en la mano izquierda.
El pasado 10 de junio fue internado en el Hospital Ángeles Roma por complicaciones en su salud, pero a los tres días fue dado de alta.
