Tensión. Policías y guardias nacionales buscaron tranquilizar a los manifestantes.
Varias decenas de personas que protestaban por la escasez de alimentos tomaron ayer jueves por más de tres horas algunas de las principales vías del centro de la capital, situación que forzó la intervención de centenares de policías y guardias nacionales que utilizaron gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes.
Al grito de "¡Queremos comida!" varias decenas de manifestantes, en su mayoría de origen pobre, bloquearon dos de las principales avenidas del centro de la capital en protesta por la creciente escasez de alimentos. Los comercios de la zona cerraron por precaución mientras el tránsito fue desviado hacia otras vías lo que generó un fuerte congestionamiento de vehículos en algunas avenidas. La protesta se inició cerca del mediodía cuando las autoridades se llevaron un cargamento de productos que iban a ser vendidos en un comercio de la zona. El retiro de los productos desató la ira de las personas que aguardaban desde la madrugada en el lugar para comprar. Los frustrados compradores de inmediato cerraron la céntrica avenida Fuerzas Armadas al grito de "¡Y va caer, y va caer, este gobierno va a caer!" mientras desde los edificios algunas personas sonaban cacerolas en señal de respaldo a los manifestantes. En pocos minutos decenas de guardias nacionales y policías, con equipos antimotines, tomaron los alrededores para tratar de reabrir la vía. "Queremos comida. Nos están matando de hambre", dijo entre desesperados gritos Wilfredo Martínez.
Responden
Durante las marchas:
⇒ Se presentaron supuestos seguidores del gobierno, algunos armados, quienes se enfrentaron a los manifestantes.
⇒ La Fiscalía General abrió una indagación por las agresiones físicas a periodistas.