Andrew Friedman, presidente de operaciones deportivas, y Farhan Zaidi, gerente general, analizan ya vías para cortar una sequía que llegará a 30 años sin ganar el Clásico de Otoño. (AP)
Tras quedarse a una victoria de conquistar la Serie Mundial, los Dodgers de Los Ángeles están motivados para buscar de nuevo esa meta, con una nómina que permanecería prácticamente intacta el año próximo, afirmaron los dirigentes del club.
Andrew Friedman, presidente de operaciones deportivas, y Farhan Zaidi, gerente general, analizan ya vías para cortar una sequía que llegará a 30 años sin ganar el Clásico de Otoño.
Los peloteros seguían vaciando sus casilleros esta semana, mientras la conversación se enfocaba en el año próximo, cuando los Dodgers buscarán finalizar la tarea que quedó inconclusa, tras siete juegos ante los Astros de Houston.
“Somos afortunados por el hecho de que buena parte del equipo volverá”, comentó Zaidi. “No sentimos que tengamos ninguna necesidad evidente. Seguiremos siendo oportunistas para mejorar la nómina”.
Se trata nada menos que de la más alta de las Grandes Ligas, con un valor de 240 millones de dólares. En estas condiciones, los Dodgers tendrían que pagar en diciembre un “impuesto al lujo”, que ascendería a 34 millones de dólares.
En cuanto a si el club deberá pagar también dicho impuesto al año siguiente, Friedman consideró que “es muy pronto para decirlo”.
Entre los agentes libres del equipo figura el pitcher Yu Darvish, quien no sobrevivió al primer par de entradas en ninguna de sus dos aperturas en la Serie Mundial, incluido el séptimo juego, en que los Dodgers sucumbieron por 5-1.
Friedman no descartó la posibilidad de firmar un nuevo convenio con el japonés, quien ha dicho que desea volver.
Además, Friedman informó que la dirigencia “monitoriza atentamente” a otro japonés, Shohei Otani, lanzador estelar y jardinero a quien él mismo ha evaluado. Consideró prematuro hablar del futuro de Otani, pero añadió que jugar dos posiciones “es factible para alguien con el talento suficiente para desempeñarse en ambas”.
Un japonés más, Kenta Maeda, pasó buena parte de la temporada en la rotación, hasta que se le envió al bullpen en los playoffs. Friedman espera que regrese a su papel de abridor el año próximo.
El ejecutivo confió en que el campocorto Corey Seager se recupere de su lesión del codo derecho sin cirugía. El primera base mexicano, Adrián González, excluido del roster en los playoffs por una hernia en un disco intervertebral, se encontraría saludable para la pretemporada. Es el mismo caso del jardinero Andrew Toles, sometido a una cirugía de rodilla, y del pitcher dominicano Yimi García, a quien se practicó la operación de Tommy John.
El contrato del coach de pitcheo Rick Honeycutt expiró después de la Serie Mundial. Friedman confió en que vuelva, junto con el resto de los colaboradores del manager Dave Roberts.
Friedman se negó a hablar de una extensión contractual para Roberts.
“Esperamos y confiamos en trabajar juntos durante un largo tiempo”, se limitó a señalar.
Zaidi aseguró que el club se concentra en contratar a un asistente del coach de bateo, para reemplazar a Tim Hyers, quien se marchó para ocupar el mismo puesto en los Medias Rojas de Boston.
Friedman desestimó las preocupaciones de que el pelotero de cuadro Chase Utley se pueda unir al cuerpo de coaches. Opinó que el veterano quiere seguir jugando.