Fue capturada en Irak. (TWITTER)
La Corte Penal de Bagdad condenó ayer a una ciudadana alemana de origen marroquí por haber formado parte del grupo extremista Estado Islámico (EI) en Siria e Irak, por lo que se convierte en la primera mujer extranjera en recibir la pena capital. El tribunal, encargado de juzgar casos de terrorismo, sentenció a la mujer, que no identificó, a morir en la horca tras ser hallada culpable de proporcionar apoyo logístico.