Nikolas Cruz, el adolescente de 19 años que provocó 17 muertos y 15 heridos en la masacre del Día de San Valentín en la secundaria Marjory Stoneman Douglas de Parkland, en Florida, ha sido acusado de 17 cargos de asesinato premeditado, dijeron hoy las autoridades.
Cruz fue ingresado a las 05:30 horas locales (10:30 GMT) a la cárcel del condado Broward vistiendo la ropa del hospital al que fue llevado tras perpetrar la peor matanza de la historia en una escuela de Florida, y la tercera mayor desde Sandy Hook (2012) y la de Virginia Tech (2007).
El alguacil del condado de Broward, Scott Israel, dijo en rueda de prensa que el detenido enfrenta 17 cargos de “asesinato premeditado”, uno por cada uno de las víctimas fatales que ya fueron confirmadas por las autoridades.
Cinco personas permanecían en estado crítico el jueves por la mañana en dos hospitales del área, informó a su vez Jennifer Smith, portavoz del sistema hospitalario Broward Health, y nueve otros estaban en buenas condiciones.
La masacre en Parkland, un suburbio próspero cerca de Fort Lauderdale, dejó a la mayoría de los muertos estudiantes dentro del campus que alberga a más de tres mil estudiantes.
El alguacil Israel dijo que el sospechoso, quien había sido expulsado de la escuela por mala conducta, tenía un rifle estilo AR-15 en "incontables" cargadores cuando entró a la escuela.
El presidente Donald Trump emitió el jueves por la mañana una proclama en honor a los muertos y ordenó que la bandera ondeara a media asta en la Casa Blanca y otros edificios y terrenos públicos, instalaciones militares y buques de guerra.
"Tantas señales de que el pistolero de Florida sufrió una perturbación mental, incluso expulsado de la escuela por un comportamiento malo y errático. Los vecinos y compañeros de clase sabían que él era un gran problema. ¡Siempre debe informarse de tales casos a las autoridades, una y otra vez!”, escribió en Twitter el mandatario.
El gobernador de Florida, Rick Scott, dijo que anoche visitó a las familias que perdieron a un ser querido y que a partir del lunes llevará a la Legislatura estatal una propuesta para asegurar que ninguna persona con problemas mentales pueda acercarse a un arma.
“La violencia debe parar, no podemos permitir que ningún otro estudiante muera en una escuela”, manifestó Scott en rueda de prensa esta mañana.
La masacre y la facilidad con la que aparentemente Cruz adquirió el arma letal, un fusil AR-15 semiautomático, volvió a atizar el debate sobre el control de armas en Estados Unidos.
Ron Runcie, el superintendente Escolar de Broward, dijo en la rueda de prensa que es momento de que este país adopte medidas “sensibles de control de armas”.
Robert Lasky, agente especial de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI), dijo que esa agencia recibió al menos dos reportes de amenazas en esa escuela, pero no compartieron la información con la policía local sobre ellas y no dijo si las amenazas eran de Cruz.
La comunidad de Parkland lloraba a sus muertos y esta tarde estaba anunciada una vigilia en la iglesia Parkridge de Coral Springs.
Enfrenta 17 cargos de “asesinato premeditado”, uno por cada uno de las víctimas fatales que ya fueron confirmadas por las autoridades. (EFE)