Con una capilla repleta de fieles y amigos del padre Miguel Ángel Cervantes, se llevó a cabo esta mañana la misa exequial por su eterno descanso, presidida por el obispo Luis Martín Barraza Beltrán, acompañado por el obispo emérito José Guadalupe Galván Galindo, así como gran parte de los sacerdotes de la Diócesis de Torreón.
La misa se ofreció en la capilla de Centro Saulo, la cual lució completamente llena, de aquellas personas que se reunieron para dar el último adiós al párroco de Santa Cecilia, de la colonia Las Julietas, que falleció el domingo a las 14:02 horas.
“Es primera experiencia como obispo aquí titular de la Diócesis de Torreón, el fallecimiento de este hermano sacerdote, muy entregado, muy alegre, muy fraterno, aunque yo tuve poco tiempo de conocerlo, pero en el decir de los hermanos sacerdotes es un entrañable hermano que Dios ha llamado a su presencia”, comentó Monseñor Luis Martín.
El padre Miguel Ángel acompañaba en las labores que realizaba la pastoral penitenciaria al interior del Cereso de la ciudad y en las acciones de atención a jóvenes con problemas de adicción a las drogas, así como en sus procesos de recuperación en grupos de adictos anónimos. También como párroco realizaba la labores de atención a las personas migrantes que estaban de paso en la región.
La misa se ofreció en la capilla de Centro Saulo, la cual lució completamente llena, de aquellas personas que se reunieron para dar el último adiós al párroco de Santa Cecilia. (GUADALUPE MIRANDA)