El equipo Sky fue el más dominante en los últimos 10 años, donde ganó 6 veces el Tour de Francia.
El operador de televisión británico Sky decidió acabar en 2020 con el exitoso equipo ciclista que ha dominado el mundo de la bicicleta durante los diez últimos años, con el objetivo buscar nuevos retos y al tiempo que les rodea la polémica y la incertidumbre.
No se sabe qué ocurrirá con el equipo ni cuáles son las razones certeras de por qué un proyecto que surgió auspiciado por la Federación británica de ciclismo y que ha cosechado hasta ocho grandes vueltas en los últimos diez años desaparecerá o se refundará casi de la noche a la mañana.
2019 será el último año en el que los Chris Froome y Geraint Thomas luzcan el maillot del Sky por las carreteras de medio mundo.
"Con esta decisión se concluirá con el patrocinio del Team Sky, el cual continuará corriendo bajo un nombre diferente si un nuevo patrocinador provee apoyo financiero para comienzos de 2020", anunció el operador de televisión en un comunicado publicado en su página web.
"El equipo competirá como Team Sky por última vez en 2019", apostilló el grupo.
La misma fuente aportó que los motivos de tal decisión son que la compañía inicia "una nueva fase en su desarrollo", lo cual casa con la noticia desvelada el pasado mes de septiembre, cuando el gigante de la comunicación Comcast adquirió Sky por 30.000 millones de libras (34.000 millones de euros).
En la cada vez más creciente batalla contra las plataformas de pago, la cadena británica parece haber tomado un nuevo rumbo y querer dejar de lado inversiones como la del ciclismo, donde han ido a parar 166 millones de euros en los últimos diez años.
No de forma poco rentable. En esa década, el Sky ha montado un reino del terror en el ciclismo, acumulando 322 victorias, ocho grandes vueltas (seis Tour de Francia, una Vuelta a España y un Giro de Italia), 52 carreras y 25 carreras de un día, categoría en la que se agrupan las clásicas, por ejemplo.
"Al tiempo que el Sky se marcha al final del año que viene, el equipo está abierto al futuro y al potencial de trabajar con un nuevo socio", aseguró David Brailsford, director del equipo británico.
Esta salida abre nuevas incógnitas en el deporte en sí, ya que el poder monetario del Sky les ha permitido disponer de los mejores corredores y con ello monopolizar el Tour de Francia en cinco de los últimos seis años.
La salida del Sky y de su capital puede provocar que el ciclismo, en términos de competitividad, se iguale, o que, en un tono más negativo, pierda seguidores e influencia en países como el Reino Unido, donde el impacto de este equipo ha sido mayor.
La decisión de apartarse no llega solo en este momento de cambio económico en Sky, también lo hace tras un 2018 en el que las acusaciones por dopaje han salpicado a la estructura británica.
Froome dio positivo en un control por salbutamol durante la Vuelta a España 2017 y su caso se alargó hasta el punto que su participación en el Tour de Francia se puso en duda hasta que la Unión Ciclista Internacional (UCI) archivó el caso y dejó correr a Froome.
Por lo tanto, son varias las razones que parecen coincidir en la marcha de un conjunto que ha tocado la gloria, dominado el ciclismo y cuyo vacío quedará pendiente de llenar para los equipos venideros.
Por ahora, aún queda un año más de Sky en el pelotón.