Estrategia. Europa busca reducir la basura y los daños ambientales. (ESPECIAL)
La Unión Europea (UE) contempla prohibir la comercialización de bastoncillos de algodón (cotonetes), cubiertos, platos y popotes de plástico como parte de una nueva estrategia para reducir la basura marina y los daños ambientales asociados.
En todo el mundo, los plásticos representan el 85 por ciento de la basura marina y se convierten en microplásticos que llegan al organismo a través del aire, del agua y de los alimentos, poniendo en riesgo todas las especies de animales.
En una propuesta legislativa presentada ayer, el Ejecutivo europeo plantea medidas comunes para todos los países de la UE con vistas a reducir en más de la mitad los desechos de diez artículos de plástico de uso único más encontrados en las playas europeas.
Juntos esos productos, entre ellos los cotonetes, cubiertos, envases y envoltorios, toallitas húmedas y globos, responden por el 70 por ciento de la basura marina.
Bruselas estima que su estrategia evitará daños ambientales que costarían 223 mil millones de euros de aquí a 2030 e impedirá la emisión de 3.4 millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2) en ese período.
Además, permitirá ahorrar 6.5 mil millones de euros a consumidores.