Violento. Rescatistas levantan el cuerpo de un hombre sirio que murió en un bombardeo. (AP)
Al menos 45 personas murieron ayer y 150 resultaron heridas, la mayoría por bombardeos de la aviación siria y la rusa contra la región de Guta Oriental, el principal feudo opositor de las afueras de Damasco, donde las fuerzas gubernamentales controlan ya el 52 % de su superficie.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos apuntó que el mayor número de fallecidos se registró en la población de Hamuriya, donde al menos dieciséis personas perdieron la vida por los ataques aéreos.
También hubo bombardeos y ataques de artillería contra las localidades de Saqb, Haza, Kafr Batna, Yisrin, Mesraba, Arbín, Harasta y Duma.
Durante la jornada de hoy, las tropas gubernamentales intensificaron su ofensiva contra Guta Oriental, donde lograron progresar y dominan ya el 52 % del territorio, tras combates contra las facciones islamistas la Legión de la Misericordia y el Ejército del Islam.
Ayer, los efectivos leales al presidente sirio, Bachar al Asad, que cuentan con el respaldo de militares y asesores rusos, arrebataron a sus oponentes la población de Beit Saua y unas granjas en Al Ashari, y han alcanzado las inmediaciones de Madira y Hamuriya.
Además, han ganado terreno por el sur de Guta Oriental y han llegado a los alrededores de Yisrin.
Con este avance, las fuerzas gubernamentales han dividido en dos la región: Una parte, en el norte, que abarca las ciudades de Duma, Harasta y las granjas que hay entre Al Rihan y Masraba; y otra, en el sur, que engloba las áreas de Arbin, Zamalka, Hamuriya, Saqba, Haza, Kafr Batna, Ain Tarma y Al Iftiris.
El ejército sirio y sus aliados comenzaron una incursión terrestre en Guta Oriental el pasado 25 de febrero, una semana después de que intensificaran los bombardeos y disparos de artillería contra la zona.
Desde entonces, han fallecido 850 civiles en Guta Oriental, de los que 182 son menores.
