El 51 % de los jueces de distrito y magistrados de circuito en México tiene al menos un familiar en el Poder Judicial, según un informe publicado hoy que denuncia que el nepotismo y las redes familiares provocan sesgos en las sentencias y baja motivación. (ARCHIVO)
El 51 % de los jueces de distrito y magistrados de circuito en México tiene al menos un familiar en el Poder Judicial, según un informe publicado hoy que denuncia que el nepotismo y las redes familiares provocan sesgos en las sentencias y baja motivación.
"El nepotismo institucional está muy extendido, es innegable, porque el 51 % de jueces y magistrados tiene al menos un familiar en el Poder Judicial de la Federación", dijo hoy Julio Ríos, autor del estudio "El déficit meritocrático", lanzado por Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI).
La investigación destaca que se perpetúan redes familiares, abundan carreras judiciales incompletas y una falta de carreras administrativas tras 25 años de la creación del Consejo de la Judicatura.
Pese a que los puestos de juez de distrito y magistrado de circuito son por concurso, hay "graves problemas" para una selección transparente, indicó el estudio.
Entre 1995 y 2016, 87 % de los concursos fueron convocatorias cerradas en las que solo podían inscribirse personas ya dentro del Poder Judicial. Es decir, excluían a profesores, académicos y abogados litigantes.
De los más de 50 distintos puestos de trabajo que hay en el Poder Judicial de la Federación -que engloba desde la Suprema Corte hasta jueces de distrito y tribunales unitarios- solo 11 participan en el procesamiento de casos y sentencias.
Y solo 5 de esos 11 puestos son parte de la carrera judicial. De estos 5, solo 2, juez de magistrado y distrito, se obtienen por concurso de oposición y exámenes estrictos.
En tanto que los otros 3 puestos se obtienen "esencialmente a discreción de jueces y magistrados", apuntó MCCI.
Todo ello incentiva a la creación de redes familiares que en el 47 % cubren plazas sin filtros meritocráticos.
De estos familiares contratados, el 68 % son por consanguinidad (49 % de ellos son padre/madre a hijo/hija).
Mientras que el 32 % restante son contrataciones por "afinidad".
En su mayoría, el 65 % de los casos, se da trabajo al cónyuge.
Por estados, los más "solidarios" con la familia son Jalisco (77 %), Nuevo León (73 %), Tlaxcala (70 %), San Luis Potosí (65 %) y Guanajuato (63 %).
Del lado contrario, los estados menos "solidarios" son Nayarit (3 %), Tabasco (16 %), Colima (20 %), Oaxaca (24 %) y Guerrero (31 %).
No obstante, faltan los datos del circuito judicial de Ciudad de México y de Toluca. Por lo que "es probable que las cifras reales sean bastante mayores", subrayó Ríos.
Pese a las diferencias regionales, el 51 % promedio es un dato "muy alto" si se compara con otros países, subrayó el experto.
En Estados Unidos, por ejemplo, una reciente encuesta externa reportó un 8 % de familiares en el Departamento de Justicia. Y en España, el 14 % de los miembros del Tribunal de Cuentas tienen familiares en la institución, remarcó el académico.
El cargo más común para familiares es de oficial administrativo.
Este puesto requiere muy pocos requisitos, el nombramiento recae en el titular del juzgado y tiene un salario bajo, por lo que puede ser una "plataforma para ingresar fácil" y después subir de categorías, estimó el académico.
Estos factores merman la credibilidad del sistema judicial en México. De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi) de México citados hoy por MCCI, el 71 % de los mexicanos cree que hay corrupción en la Justicia.
Y según un estudio de World Justice Project (WJP), el 68 % cree que tener familiares es "decisivo" para hacer carrera en la Justicia mexicana.
Para mejorar la impartición de justicia, el informe recomendó transparentar conflictos de interés, procesos y requisitos de promoción y sanción, crear una carrera administrativa y fortalecer la carrera judicial.