Inversión. La empresa ha invertido 280 millones de dólares para fortalecer la seguridad de los trabajadores.
A 80 kilómetros de Gómez Palacio (Durango), se encuentra Velardeña; un pueblo minero que en 1907 perdió a 99 personas en un accidente laboral dentro de la mina "Terneras"; 56 años después, Industrias Peñoles implementó ahí una planta de zinc llamada "El Roble". Desde entonces la presencia de esta empresa ha favorecido el progreso de la comunidad y la calidad de vida de los trabajadores.
Actualmente, esta mina tiene 450 colaboradores; el 20 por ciento son mujeres y el 80 son hombres. Además, es considerada como una de las más seguras de México por los protocolos que se llevan a cabo y su tecnología de vanguardia.
Como parte del Día Mundial de la Seguridad y Salud en el Trabajo, autoridades como el secretario de Trabajo y Previsión Social, Roberto Campa Cifrián; el gobernador de Durango, José Aispuro Torres; así como el director de minas de Peñoles, Luis Humberto Vázquez San Miguel; y el secretario general del Sindicato Nacional Minero Metalúrgico Frente, Carlos Pavón Campos; recorrieron las instalaciones de El Roble para revisar sus protocolos de seguridad.
En el encuentro, Roberto Campa Cifrián y José Aispuro Torres tomaron como ejemplo esta mina e hicieron un llamado a los empresarios del ramo al cumplimiento de seguridad en el trabajo, pues la intención es llegar a cero accidentes fatales en el sector minero.
"A nivel nacional, se ha registrado una disminución importante de accidentes laborales, pues de 434,600 registrados en el 2012, bajó a 394,302 en el 2016", comentó el secretario de Trabajo y Previsión Social, Roberto Campa Cifrián.
"Es un ejemplo de cómo la seguridad ha sido un factor que siempre ha sido lo más importante para ellos. Su producción de zinc para nosotros es importante pues se toma en cuenta a Durango como modelo a seguir para los empresarios", indicó el gobernador José Aispuro Torres.
Por su parte, Luis Humberto Vázquez San Miguel indicó que Peñoles ha invertido hasta 280 millones de dólares para fortalecer la seguridad de los trabajadores; la más reciente fue por 60 millones y formó parte de los procesos de adaptación a las nuevas tecnologías.
"Aquí se trabajan con cuatro ejes de seguridad: primero que los trabajadores cuenten con equipo de protección personal; contar con los procedimientos de operación; la capacitación extensiva y con lugares seguros", dijo Vázquez San Miguel.
Asimismo, Carlos Pavón Campos resaltó la importancia de estar al tanto de los protocolos de seguridad, pues es fundamental que "los trabajadores vayan a sus labores y regresen a sus casas con bien".
