Problemas. Para el segundo día del festival, algunos 'food trucks' fueron cerrados por medidas de salubridad. (ESPECIAL)
Lo que pintaba para un espectacular fin de semana lleno de rock y metal bajo la "custodia" de los dioses en Teotihuacán, terminó en pesadilla para miles de fanáticos de la música.
La edición 2018 del Force Fest dejó con un mal sabor de boca a más de 5 mil personas, por lo menos, según la petición hecha en change.org, donde se denuncia "fraude e incumplimiento de contrato" por parte de los organizadores.
Las principales quejas plasmadas en esta "denuncia masiva" son: la cancelación de bandas estelares en el cartel, como Rob Zombie, Exodus, Lamb of God, Testament, DevilDriver, y Senses Fail. Además, Danzig tampoco se presentó, pese a estar en el lugar, por una supuesta decisión de Slayer, quienes quisieron mover los horarios.
Los usuarios se quejan también de las condiciones de insalubridad que privaban en el lugar, con baños insuficientes y en mal estado.
El sistema 'cashless' (pago sin efectivo) no funcionó debido a que muchos puestos de comida no contaban con ese sistema. Al día siguiente fue retirado. La señal de los celulares falló, pese a que el evento estaba patrocinado por una importante marca de telefonía celular.
Algunos tours oficiales no cumplieron con el viaje redondo o no estuvieron a tiempo al final de cada jornada.
La lluvia hizo que se enlodara prácticamente todo el club de Golf de Teotihuacán, por lo que la zona se volvía intransitable. Los quejosos argumentan además que imperaba un ambiente de inseguridad, debido a que en cierto momento se dejó pasar a cualquier persona al festival sin ningún tipo de revisión. Por último, piden que se les dé una explicación o un reembolso.