Queja. El problema es que desde 2017 el trabajo del Semefo y las funerarias incrementó. (EL UNIVERSAL)
La sobrecarga de trabajo que mantiene el Servicio Médico Forense (Semefo) y las funerarias en Tijuana, causó el enojo de residentes que viven a un costado de los negocios, cuyo rechazo resultó en una manifestación y la entrega de una queja ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) en Baja California y la exigencia de reubicar los espacios mortuorios de esa zona.
Se trata de habitantes de las colonias Juárez, Cacho y Madero Sur, aunque vecinos de El Rubí y Morelos también comienzan a sumarse a la causa. Todos ellos viven desde hace años a un lado o frente al Semefo y otras empresas dedicadas a velar muertos, las cuales están concentradas sobre el bulevar Fundadores, una de las principales vialidades. Son aproximadamente 15 mil afectados.
El problema, según explicó el representante legal de los residentes, Rafael Mauricio Cruz Manjarrez García, es que desde 2017, el trabajo del Semefo y las funerarias incrementó exponencialmente a consecuencia del repunte de violencia; por ejemplo, tan sólo de enero a octubre de 2018, más de 2 mil personas han sido asesinadas. Aunque el enojo de los vecinos es de años atrás, dijo, las molestias se agudizaron porque ninguna de las instancias tiene la capacidad para atender la demanda que mantiene el nivel de violencia que hay actualmente en la ciudad.
La exigencia a las autoridades locales es reubicar al Semefo y con ellos a las funerarias.