
Resultó herido en la mano, brazo y abdomen, pero salvó su vida. (ARCHIVO)
El 13 de mayo del año 1981, en la Plaza de San Pedro, en la Ciudad del Vaticano, sufrió un atentado el entonces Sumo Pontífice de la Iglesia Católica, Karol Józef Wojtyla, mejor conocido como Juan Pablo II, ahora santo de la Iglesia.
El suceso tuvo lugar mientras Juan Pablo II se desplazaba por la Plaza en un vehículo abierto.
Mehmet Ali Agca, un ciudadano turco expandillero y miembro del grupo de los lobos grises, le disparó al Papa, quien resultó herido en la mano, brazo y abdomen, pero salvó su vida.
Ali Agca fue puesto a disposición de las autoridades.
El ahora santo Juan Pablo II lo visitó luego en la prisión de Rebibbia, charló con él y le concedió el perdón.