Tomando en cuenta la temporada decembrina y los festejos de aniversarios en las comunidades rurales, se incrementó el sacrificio de animales en las instalaciones del rastro municipal, además de que varias y grandes empresas realizan las posadas a sus trabajadores e incluyen en su menú la carne bovina.
El jefe del rastro, Eduardo Guillén, comentó que la matanza de reses varía constantemente, ya que en algunos días llegan 10 animales y hasta 40 en algunas ocasiones, y actualmente llegan 50 o más. Añadió que con las reliquias, son contados los cerdos que llegan para su sacrificio.