Andrés Gimeno junto a Rafael Nadal, luego de un triunfo del español en 2011. (ARCHIVO)
El extenista español Andrés Gimeno falleció ayer en un hospital de Barcelona a la edad de 82 años tras una larga enfermedad.
Gimeno ganó el torneo de Roland Garros en 1972, convirtiéndose en el hombre más veterano en conquistar este torneo, con 34 años y 10 meses. Además de este Grand Slam, logró otros cuatro títulos más.
El tenista barcelonés se proclamó además campeón de dobles en Wimbledon en 1967 junto al estadounidense Pancho Gonzales. Dos años después disputó la final del Abierto de Australia. En 1972 también quedó finalista en dobles junto a José Luis Arilla.
Nacido en Barcelona el 3 de agosto de 1937, se inició en el tenis de la mano de su padre, el tenista y entrenador Esteban Gimeno. Recibió sus primeras lecciones de tenis en las pistas del Real Club Tenis de Barcelona.
En 1957 fue campeón absoluto, título que revalidó en 1959.
Cuatro años antes había ganado los Internacionales de Francia, en categoría júnior, un preludio de lo que sucedería después ya en el cuadro más importante.
En 1958 figuró por primera vez en el equipo español que disputó la Copa Davis.
El 26 de septiembre de 1966, Gimeno alcanzó en Barcelona el título de campeón del Mundo profesional-Copa Fred Perry, derrotando en la final a Rod Laver, con el que un día antes se había adjudicado ese mismo título en dobles.
En 1969 fue finalista del Open de Australia y al año siguiente fue finalista en Wimbledon.
El 4 de junio de 1972 venció en la final del torneo Roland Garros al local Patrick Proisy.
En 1973 dejó el tenis profesional como consecuencia de una lesión de menisco, dedicándose desde entonces al club de tenis que lleva su nombre en la localidad barcelonesa de Castelldefels, centro pionero en la formación de tenistas, por el que pasaron Arantxa Sánchez Vicario, Alex Corretja, Pato Clavet, Mary Jo Fernández o Marcel Granollers.
Después de su retirada se encargó de la Escuela Nacional de Tenis, en el que estuvo hasta su cese en 1979.
Además, entre 1984 y septiembre de 1985 fue entrenador del equipo femenino suizo.
El 22 de octubre de 2011, el tenis español le tributó un homenaje en el que los fondos recaudados fueron para Gimeno, que en esos momentos pasaba por una delicada situación económica y personal.
Era miembro del Salón de la Fama del Tenis Internacional de Newport (2009) y estaba en posesión de la medalla de oro de la Real Orden del Mérito Deportivo (2009).