'Es una obligación humana rescatar a la gente que se está ahogando. Lo que Italia quiere es una reforma del sistema disfuncional de Dublín', afirmó la política conservadora. (ARCHIVO)
La presidenta electa de la Comisión Europea (UE), la alemana Ursula von der Leyen, se comprometió hoy con el objetivo de lograr una política migratoria solidaria hacia los países que afrontan en primera línea la migración, a la vez que defendió los rescates en el Mediterráneo.
"Es una obligación humana rescatar a la gente que se está ahogando. Lo que Italia quiere es una reforma del sistema disfuncional de Dublín", afirmó la política conservadora, en declaraciones al grupo mediático LENA -entre ellos el español "El País" y el alemán "Die Welt".
Von der Leyer alude ahí a la fórmula que obliga al primer país de territorio comunitario a gestionar la petición de asilo de los refugiados, para preguntarse a continuación "cómo pudo llegar a firmarse un acuerdo tan fallido".
"Puedo entender que los países de la frontera exterior no quieren que se les deje solos", prosigue, y afirma a renglón seguido que los países que afrontan en primera línea la crisis migratoria "merecen nuestra solidaridad".
En sentido parecido se pronuncia la presidenta electa de la CE, quien logró imponerse en la votación del Parlamento Europeo, el martes, por un margen muy estrecho, en otra entrevista concedida a varios medios europeos, entre ellos el español "La Vanguardia" y el alemán "Süddeutsche Zeitung".
"Es una obviedad que hay que rescatar a la gente en peligro en el mar", insiste, en relación a la situación creada por la acción de ONG como la alemana "Sea Watch", cuya capitana, Carola Rackete, desafió al ministro del Interior, Matteo Salvini, y entró sin permiso en aguas italianas para desembarcar a un grupo de migrantes.
Los esfuerzos deben concentrarse en evitar que la gente se lance al mar en lanchas y en combatir el crimen organizado o mafias de tráfico humano que operan en Turquía, Marruecos o Argelia, dice.
Mientras la gente "se aventure a esos viajes mortales, tendremos la obligación de ayudarles", pero una vez esas personas lleguen a las costas hay que ser claros y actuar, ya que "quienes no tienen derecho al asilo deberán volverse".
Von der Leyen insiste en la necesidad de tener "unas fronteras exteriores más seguras" y en buscar un compromiso en el sistema de asilo "para que Schengen funcione y las fronteras internas puedan seguir abiertas".